Las primeras nevadas de este fin de semana han provocado el cierre de varias carreteras en Cantabria, afectando principalmente a las zonas de montaña. Este domingo, las autoridades han informado que el puerto de Lunada, en la carretera CA-643, está cerrado debido a la nieve acumulada. El tramo afectado se encuentra entre los kilómetros 6 y 14, en el recorrido entre San Roque de Riomiera y el alto. La acumulación de nieve ha hecho imposible la circulación de vehículos sin el equipamiento adecuado.
La situación también afecta al puerto de Palombera, en la CA-280, donde entre los kilómetros 23 y 30 se ha impuesto la obligatoriedad de cadenas o neumáticos de invierno para poder circular. Esta medida es esencial para garantizar la seguridad en el acceso a las zonas de Cabuérniga, Espinilla y Saldecedillo. Además, en esta vía está prohibida la circulación de autobuses, camiones y vehículos articulados, debido a las difíciles condiciones de la carretera.
Otra de las vías afectadas es la CA-183, en el Alto Campoo, donde el tránsito se ha restringido a camiones y vehículos articulados entre los kilómetros 14 y 24, en el tramo que va desde Abiada, cerca de Reinosa, hasta Brañavieja. Esta medida busca reducir los riesgos en una de las zonas más complicadas por la acumulación de nieve y hielo.
Por último, en la N-621, en el tramo de Vejo, entre los kilómetros 121,8 y 128, la circulación de camiones y vehículos articulados está también prohibida. El resto de los vehículos deberán hacer uso de cadenas o neumáticos de invierno para garantizar la seguridad en las carreteras, de acuerdo con la información proporcionada por la DGT, y confirmada por Elmiradordigital.es.
Se recomienda a los conductores que se desplacen por estas zonas que consulten la previsión meteorológica y las condiciones de las carreteras antes de viajar, y que respeten las recomendaciones de seguridad emitidas por las autoridades para evitar accidentes.