La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha puesto en valor la nueva línea de producción que Dynasol ha inaugurado en su planta de Gajano, una inversión de 72 millones de euros que incrementará en 20.000 toneladas la capacidad de fabricación de caucho. La planta, desde la que se exporta el 90% de la producción a más de 70 países, se convierte así en uno de los pilares de crecimiento del grupo, y también de la industria cántabra.
Durante su visita a las instalaciones, Buruaga ha subrayado que este proyecto refuerza la competitividad y proyección futura de la empresa, al mismo tiempo que genera empleo estable con la incorporación de 20 nuevos trabajadores. La presidenta ha remarcado además que esta ampliación responde a una demanda creciente en sectores como la automoción eléctrica, la tecnología, los adhesivos de gran consumo y el asfaltado de infraestructuras.
La visita también ha servido para anunciar una futura inversión adicional de 24 millones de euros por parte del grupo, lo que, según Buruaga, demuestra «el compromiso real y continuado» de Dynasol con Cantabria. “Su apuesta por esta tierra es firme y ejemplar, y un claro reflejo de lo que queremos impulsar desde el Gobierno”, ha afirmado.
La jefa del Ejecutivo ha elogiado el recorrido de la compañía, que con más de un millar de empleados entre España y México, ha sabido posicionarse como uno de los referentes del sector, sorteando con éxito la volatilidad de los mercados internacionales. En su opinión, Dynasol es “un modelo de esfuerzo, adaptación y visión”, capaz de consolidar una presencia sólida a nivel global en un entorno geopolítico complejo.
Durante el recorrido por las instalaciones estuvieron presentes, además de la presidenta regional, el consejero de Industria, Eduardo Arasti; el director general de Dynasol, Felipe Jesús Varela; el responsable del grupo Kuo, Alejandro de la Barrera; el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz; y el alcalde de Marina de Cudeyo, Pedro Pérez Ferradas.
Reindustrialización como prioridad
Buruaga ha insistido en que reactivar el tejido industrial es una de las prioridades de su mandato, apostando por políticas que favorezcan la inversión y simplifiquen los trámites administrativos. Ha recordado iniciativas como la Ley de Simplificación Administrativa o la reforma fiscal, así como los incentivos dirigidos a captar inversión productiva.
Estas medidas, ha señalado, ya están teniendo un efecto directo en la economía cántabra, con un crecimiento industrial del 2% —en contraste con la caída del 0,1% a nivel estatal— y un destacado posicionamiento de Cantabria en atracción de capital extranjero y creación de empresas.
La presidenta también ha hecho alusión a los datos del paro conocidos este miércoles, que apuntan a una bajada continuada en el número de desempleados, situando a la comunidad entre las más dinámicas del país en términos de empleo. “Estamos liderando la reducción del paro y la generación de trabajo estable, y eso es fruto de políticas que funcionan y de la colaboración estrecha con el tejido empresarial”, ha concluido.