La Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria comenzará a abonar a partir de hoy el saldo final de los ecorregímenes y de la ayuda a la producción sostenible de proteínas, por un importe total de 5.087.864 euros, que beneficiará a 4.385 agricultores y ganaderos de la región. Estas ayudas están íntegramente financiadas por el Fondo Europeo Agrícola de Garantía (FEAGA).
Este pago corresponde al 40% pendiente del total de los ecorregímenes, complementando los abonos realizados durante los meses de marzo y abril. Además, se subsana un error detectado en el primer pago del Eco-régimen de Pastoreo Extensible, donde no se computaron correctamente las hectáreas comunales. En este concepto se transferirán 4.800.489 euros a 3.752 beneficiarios.
La consejera María Jesús Susinos ha señalado que el montante final destinado a los ecorregímenes alcanza los 7.664.739 euros, y ha destacado la importancia de estas ayudas, que están dirigidas a quienes voluntariamente adoptan prácticas medioambientales sostenibles, más allá de las obligaciones establecidas en la Condicionalidad Reforzada de la PAC.
“Estas prácticas voluntarias, vinculadas a la agricultura de carbono y la agroecología, buscan mejorar el rendimiento ambiental y climático del sector agrario”, ha subrayado la consejera.
Solicitud de nuevos fondos
Junto con este abono, la Consejería solicitará este viernes los fondos para efectuar nuevos pagos dentro de la Política Agraria Común (PAC). En concreto, se gestionarán 4.668.230 euros en ayudas a Zonas con Limitaciones Naturales (ZLN), que llegarán a 2.411 agricultores y ganaderos a título principal (ATPs) a finales de la próxima semana.
Además, se tramitarán:
- 1.829.022 euros del saldo final de la Ayuda Básica a la Renta, dirigida a 3.914 beneficiarios.
- 440.190 euros del pago redistributivo, destinado a 3.821 personas.
- 371.543 euros para el pago a jóvenes agricultores, que beneficiará a 249 jóvenes del sector.
La consejera Susinos ha subrayado que el conjunto de estas ayudas es fundamental para garantizar la sostenibilidad y viabilidad del sector primario cántabro, y ha insistido en su papel clave en la fijación de población en el medio rural y el relevo generacional. “Estamos hablando de un sector esencial para Cantabria, que necesita estabilidad y apoyo para seguir desarrollando su función económica, social y ambiental”, ha concluido.