El Consejo de Gobierno ha dado luz verde a la modificación del contrato público de colaboración público-privada firmado en 2014 para la modernización tecnológica del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla y el Servicio Cántabro de Salud (SCS). Esta actualización supondrá una inversión superior a los 37 millones de euros y permitirá la renovación de infraestructuras informáticas esenciales para la digitalización del sistema sanitario cántabro.
La medida contempla una importante modernización del Centro de Proceso de Datos (CPD) Principal y del CPD de respaldo, con la sustitución de los servidores actuales por otros más potentes y con mayor capacidad de cómputo y almacenamiento. Esta mejora es clave para responder a la creciente demanda de procesamiento de datos en el ámbito sanitario, especialmente en áreas como el radiodiagnóstico, la anatomía patológica digital o la genética molecular, donde se manejan volúmenes masivos de información.
Entre las iniciativas que se beneficiarán de esta modernización se encuentran la ampliación de la imagen digital a Atención Primaria, la renovación de equipos de radiodiagnóstico dentro del Plan INVEAT, y la implementación de nuevas soluciones en telemedicina para la atención de pacientes crónicos. También se reforzará la digitalización de cuidados críticos y la medicina de precisión, técnicas que requieren una infraestructura informática avanzada para procesar grandes cantidades de datos clínicos y genómicos.
El consejero de Salud, César Pascual, ha subrayado la necesidad de esta inversión, recordando que el contrato original ya contemplaba la posibilidad de adaptarse a las innovaciones tecnológicas. “Era una previsión lógica en un contrato de 20 años, dado el ritmo al que avanza la tecnología”, ha señalado. Pascual ha destacado que esta modificación supone un 4,87% del precio total del contrato, dentro del margen del 5% permitido para este tipo de ajustes.
Esta no es la primera actualización del contrato para reforzar la infraestructura tecnológica del sistema sanitario cántabro. En 2020, se llevó a cabo una modificación extraordinaria para paliar las deficiencias informáticas del sistema, que estaban afectando a servicios críticos. Aquella actualización permitió mejorar la centralización de la información en Atención Primaria, ampliar la receta electrónica a todos los hospitales cántabros y fortalecer el CPD de respaldo ubicado en Sierrallana.
Según Pascual, la tendencia actual de digitalización y el aumento de la demanda de recursos informáticos habrían agotado la capacidad tecnológica existente este mismo año, comprometiendo la operatividad de la plataforma de virtualización sobre la que se sustentan los sistemas de información del SCS. Por ello, considera imprescindible esta inversión, no solo para atender las necesidades actuales, sino también para preparar la infraestructura tecnológica de la sanidad cántabra de cara a los próximos nueve años.
El consejero ha hecho especial hincapié en la importancia de reforzar la ciberseguridad del sistema, una prioridad en el contexto actual de transformación digital. Asimismo, ha destacado que la llegada de la Inteligencia Artificial al ámbito sanitario supondrá un cambio disruptivo que exige infraestructuras preparadas para procesar grandes volúmenes de datos con garantías de seguridad y eficiencia.
«Debemos innovar constantemente para mantener el ritmo de la transformación digital que estamos impulsando en el Servicio Cántabro de Salud», ha afirmado Pascual. En este sentido, ha subrayado que esta modernización permitirá a Cantabria seguir avanzando en los proyectos europeos en los que participa dentro del Plan de Salud regional y consolidarse como un referente en digitalización sanitaria.