Las obras de ampliación de la carretera que conecta los barrios de San Vicente y Salcedo, en Vioño, están a punto de concluir. Así lo ha anunciado el alcalde de Piélagos, Carlos Caramés, durante una visita a los trabajos junto al concejal de Obras Públicas y Movilidad, César Blanco, y la alcaldesa pedánea de la localidad, Inmaculada Araunabeña.
La actuación, que supone una inversión de más de 250.000 euros, permitirá recuperar el doble sentido de circulación en el tramo que lo perdió en la pasada legislatura, una modificación que generó un importante malestar entre los vecinos de Vioño, Zurita y Oruña.
Obras clave para la seguridad vial
Como parte de la intervención, el Ayuntamiento también ha procedido al derribo de la “casa tapón”, una edificación que suponía un peligro en el cruce de esta carretera con la CA-231 (Vioño-Oruña).
Esta semana se llevará a cabo el asfaltado final de la nueva sección ampliada del vial, asegurando así que la carretera pueda volver a operar en doble sentido con todas las garantías de seguridad.
Un compromiso con los vecinos
Caramés ha recordado que la modificación realizada en la anterior legislatura convirtió un tramo de la carretera en vía de sentido único, lo que generó protestas ciudadanas con manifestaciones en las que participaron cientos de personas.
Para corregir esta situación, el Consistorio tramitó los permisos necesarios con la Confederación Hidrográfica, logrando la autorización para ampliar el tramo final de la carretera mediante la ocupación de 1,20 metros del margen derecho (dirección Salcedo). Además, se alcanzó un acuerdo con propietarios de una finca privada para facilitar los trabajos.
Diálogo y colaboración vecinal
El alcalde ha destacado la buena disposición de los vecinos, que han colaborado en la búsqueda de una solución definitiva a los problemas derivados de las obras previas.
Por su parte, la alcaldesa pedánea, Inmaculada Araunabeña, ha agradecido al Ayuntamiento su sensibilidad con esta reivindicación y ha lamentado que en la anterior legislatura las protestas vecinales fueran ignoradas. “Solo pedíamos aceras y conservar el doble sentido de circulación”, ha señalado.
Con esta actuación, el Ayuntamiento de Piélagos da respuesta a una demanda vecinal histórica, garantizando una mejora en la movilidad y la seguridad vial en la zona.