El Gobierno de Cantabria, encabezado por el Partido Popular, ha decidido detener el contrato relacionado con el gran acuífero que se planeaba entre Santillana del Mar y San Vicente de la Barquera, una iniciativa previamente anunciada por la administración anterior, conformada por el Partido Regionalista de Cantabria (PRC) y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE). La medida se tomó debido a la incertidumbre que rodea al proyecto, ya que no se contaba con informes favorables de los organismos pertinentes para llevar a cabo las prospecciones previstas. Además, se consideraron alternativas de suministro de agua más viables desde el punto de vista técnico y económico.
El consejero de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Roberto Media, explicó que la decisión se basó en un informe que destacaba la falta de autorización de Cultura, las dudas sobre la viabilidad del proyecto y la ausencia de información sobre la cantidad y calidad del agua subterránea. Se consideró que extraer agua a una profundidad de 700 metros podría no ser factible y, en caso de serlo, resultaría antieconómico. Se recomendó, por lo tanto, suspender el contrato de las perforaciones hasta obtener todos los estudios y autorizaciones necesarios.
En lugar de seguir adelante con el proyecto del acuífero, el Gobierno de Cantabria está explorando otras opciones más factibles, como aumentar la captación de agua del río Deva y utilizar el trasvase a través del embalse del Ebro. La Consejería de Medio Ambiente de Cantabria tiene la intención de solicitar al Ministerio para la Transición Ecológica que permita aumentar la captación de agua del río Deva. Actualmente, se derivan 5 hectómetros cúbicos a la Autovía del Agua, aunque la capacidad total del río permite obtener hasta 20 hectómetros cúbicos. Si se incrementara la captación del río Deva y se pudiera alcanzar la capacidad total de la Autovía del Agua, que abastece a Cantabria, se aseguraría el suministro futuro en la región sin contratiempos.
El consejero Roberto Media destacó la necesidad de esta medida en declaraciones a los medios, tras la entrega de vehículos a la empresa pública Mare. Según explicó, con la captación actual del río Deva y el trasvase desde el pantano del Ebro, Cantabria cuenta con suficiente caudal para evitar cortes en el suministro de agua en la región.