La diputada y portavoz del PRC en materia de Sanidad, Paula Fernández, ha exigido hoy a la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, que «busque un relevo» al titular de la Consejería de Salud, César Pascual, porque la Comunidad Autónoma «no puede permitirse a un consejero que quiere acabar con los consultorios rurales».
«Es un ataque directo a los profesionales que ejercen su trabajo en el mundo rural, a los médicos y a todos; parece que ahora en el mundo rural sólo se van a quedar los agricultores y los ganaderos, eso sí, acompañados por el lobo». Así ha respondido la diputada regionalista a las declaraciones realizadas ayer por el consejero al asegurar que los consultorios rurales «no tienen futuro» y que no se puede ofrecer una carrera profesional a «un médico aislado en un pueblo».
«Para quien no hay ningún futuro es para él», ha replicado Fernández en una rueda de prensa en la que ha comparecido acompañada por los alcaldes de Ruesga, Villacarriedo, Rasines, Soba, Arenas de Iguña y Miera, así como por el presidente de la Junta Vecinal de Vega de Villafufre y una concejala de Voto, todos ellos municipios rurales que sufren en primera línea las carencias de la atención médica en sus consultorios.
La diputada ha pedido la intervención de la presidenta «sanitaria», como se autoproclamó Sáenz de Buruaga al tomar posesión, ante unas declaraciones que constatan «las verdaderas intenciones» de un consejero que, en sus ocho meses de mandato, ha demostrado que «no puede continuar en el Gobierno». «Cantabria no puede permitirse un consejero de Salud que reniega de la sanidad pública, que defiende copagos, o la sanidad ‘business’ como él la llama, y que ahora da un paso más y se propone acabar con los consultorios rurales», ha recalcado.
A su juicio, las palabras de Pascual explican por qué la Atención Primaria «languidece» en el mundo rural desde la llegada del PP al Ejecutivo y demuestran que «estaba planificado» y que es una cuestión de «ideología» abandonar «a su suerte a los vecinos de los pueblos de Cantabria», incluidos «vecinos octogenarios y enfermos crónicos que viven solos y no tienen medio de transporte para acudir a los centros de salud de las cabeceras de comarca».
«El consejero dice que no podemos dejar aislados a los médicos, pero sí podemos dejar aislados a nuestros vecinos», ha lamentado.
Fernández ha recordado manifestaciones de la hoy presidenta en el Parlamento cuando reivindicaba más y mejor atención médica en los núcleos rurales y se ha preguntado «qué dice ahora», si «está de acuerdo con las declaraciones de su consejero de Salud» y qué pasa con «las políticas de despoblamiento» y el compromiso reflejado en el acuerdo de investidura que firmó con el PRC para continuar las acciones iniciadas por el anterior Gobierno para afrontar el reto demográfico, entre las que resulta fundamental «una sanidad fuerte en el mundo rural».
«Le estamos diciendo a la presidenta alto y claro que destituya a este consejero», ha agregado la parlamentaria, quien ha reprochado que todas las soluciones planteadas por el Grupo Regionalista durante meses para crear incentivos y contrapartidas para los profesionales que ejercen en las zonas rurales, abonar kilometraje, resolver los concursos de traslados pendientes desde hace un año o considerar la medicina de familia y la pediatría categorías deficitarias, «como hacen en Madrid», hayan «caído en saco roto», mientras Pascual se limita a negociar las vacantes de difícil cobertura de Laredo. «Estamos de acuerdo con ello, pero qué pasa con las vacantes de difícil cobertura del mundo rural», ha cuestionado.
Por todo ello, la diputada regionalista ha apelado tanto a la presidenta «sanitaria» como a los alcaldes rurales del PP, a los que ha preguntado si «están de acuerdo con que no haya médicos en los pueblos» y van a permanecer «callados y sin defender a sus vecinos».
«Los regionalistas lo tenemos claro, nosotros sí creemos en los pueblos y en la vida rural y vamos a trabajar con uñas y dientes no sólo para mantener abiertos los consultorios, sino también para dotarlos con los servicios médicos necesarios y atender a unos vecinos que tienen los mismos derechos que los que viven en las ciudades», ha concluido Paula Fernández.