El Vicente Trueba vivió este martes una de esas noches que se quedan grabadas en la memoria. El Bathco BM Torrelavega cuajó su mejor actuación de la temporada —y quizás una de las más brillantes desde que compite en la élite— para imponerse por 31-28 al Fraikin BM Granollers y clasificarse por tercer año consecutivo para la fase final de la Copa del Rey, que se disputará en Irún.
No fue una victoria más. Fue un recital en toda regla, una exhibición coral con Leo Tercariol como pilar defensivo y con una grada volcada desde el primer hasta el último minuto. El portero brasileño firmó una actuación sobresaliente, sacando manos imposibles en los momentos clave y convirtiéndose en el gran protagonista de la noche.
El encuentro arrancó con intercambio de golpes entre ambos conjuntos. El equilibrio marcó los primeros compases, con los ataques superando a las defensas y el marcador avanzando parejo hasta el 9-9 mediada la primera mitad. Fue entonces cuando el Bathco empezó a mostrar su versión más sólida. Tercariol cerró la portería y los de Cuétara comenzaron a correr, encontrar espacios y a conectar con su afición.
El final del primer tiempo fue un ir y venir constante, con exclusiones y decisiones ajustadas que mantuvieron el pulso eléctrico. Con un penalti transformado por Rubiño, los naranjas lograron marcharse al descanso con empate a 14, pero con sensaciones muy positivas.
La segunda parte fue otra historia. El Bathco salió como un vendaval, liderado por un Ángel Fernández incansable en ataque y una defensa que asfixió a los visitantes. A los diez minutos del segundo acto, el marcador reflejaba un 21-16 que hizo estallar al Trueba. El parcial favorable y la solidez defensiva dejaban entrever que algo especial estaba ocurriendo.
El Granollers, desdibujado, intentó reaccionar, pero cada intento se topaba con el muro Tercariol. Ni los tiempos muertos de Antonio Rama ni los cambios de dibujo lograron frenar a un Bathco en plena ebullición. Prokop, Colunga, Martínez… todos sumaron, todos aportaron en un bloque que se multiplicó en cada acción.
Aunque el tramo final trajo algo de suspense con los catalanes recortando distancias hasta situarse a solo dos tantos (29-27), una aparición decisiva del canterano Nicolai Colunga rompió la defensa rival y sentenció el partido. El tanto de Martínez sobre la bocina puso la guinda a una noche perfecta.
Con este triunfo, el Bathco BM Torrelavega estará, por tercera vez seguida, en la Final a 8 de la Copa del Rey. Un éxito que consolida a los cántabros como uno de los proyectos más ilusionantes del balonmano nacional. Irún ya espera. Y los de Cuétara llegan lanzados.