En la resolución del Juzgado de lo Social n.º 3 de Santander, se ha dictaminado la incapacidad permanente total de una mujer, quien ejercía como limpiadora, debido a los síntomas de disnea y fatiga asociados al síndrome postcovid. La sentencia, recientemente comunicada y sujeta a posible recurso de suplicación ante el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, se basa en la demanda presentada por la mujer luego de que la Seguridad Social rechazara su solicitud de incapacidad.
A pesar de la decisión de la administración de no calificar a la demandante como incapacitada permanente, argumentando la ausencia de reducciones anatómicas o funcionales que anulen su capacidad laboral, el Juzgado n.º 3 ha divergido en su evaluación. El magistrado destaca que la clínica presentada por la mujer no puede considerarse leve o poco significativa, ya que el informe de síntesis subraya la intensidad de los síntomas de disnea y fatiga.
La sentencia concluye que la demandante no puede desempeñar su labor como limpiadora y, por lo tanto, declara su incapacidad permanente total debido a enfermedad común. Además, se le otorga el beneficio de una pensión equivalente al 55 por ciento de la base reguladora. Este fallo destaca la importancia de considerar los efectos a largo plazo del síndrome postcovid en la capacidad laboral de los individuos afectados.