El Sardinero volverá a vestirse de gala esta noche. Bajo los focos y con el aire frío de diciembre recorriendo las gradas, el Racing recibirá al Villarreal CF (19:00 horas) en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, en un duelo que trasciende lo futbolístico: un partido que une memoria y presente, esfuerzo y nostalgia, el espíritu de un club centenario frente a la jerarquía de un equipo de Champions League.
La cita tiene tintes de reencuentro. Marcelino García Toral regresa al lugar donde su nombre quedó grabado en las mejores páginas del racinguismo. Desde el banquillo visitante, el técnico asturiano volverá a pisar el césped donde llevó al equipo a la extinta Copa de la UEFA, a las semifinales coperas y a una permanencia histórica en Primera. Esta vez, su paso por Santander no estará marcado por abrazos ni cánticos, sino por el respeto de una grada que lo recuerda con gratitud.
El Racing llega a la cita en su mejor momento del curso. Líder en la LaLiga Hypermotion tras cinco jornadas consecutivas sin perder —tres victorias y dos empates—, los de José Alberto López afrontan el encuentro con la confianza de quien se sabe capaz de competir ante cualquiera. Con 36 puntos en liga y tras dejar atrás a la SD Logroñés y a la Ponferradina en rondas anteriores, el equipo cántabro quiere mantener su inercia ganadora también en el torneo del KO.
El vestuario respira ilusión. Villalibre, con diez goles, y Andrés Martín, con nueve, representan la pegada de un bloque que ha convertido el gol en su seña de identidad (41 tantos, máximo registro colectivo de la categoría). A su lado, Vicente, el cerebro del equipo, lidera la clasificación de asistentes con once pases de gol. No estarán Ezkieta ni Michelin, ambos lesionados, pero sí todo el peso ofensivo y el impulso anímico de un equipo que juega con el alma cuando lo hace en casa.
El Villarreal CF, tercer clasificado en Primera y uno de los conjuntos más en forma del campeonato, llega descansado tras el aplazamiento de su encuentro ante el Levante UD por la alerta roja en la Comunidad Valenciana. El cuadro groguet no conoce la derrota desde su visita al Bernabéu, el 4 de octubre, una racha de nueve partidos invicto que incluye siete victorias. No podrán estar Ilias Akhomach ni Pape Gueye, llamados por sus selecciones para la Copa África, pero sí Moleiro y Buchanan, sus dos principales amenazas de cara al gol.
Todo está preparado para una nueva noche copera en los Campos de Sport. La hierba, la afición y la historia volverán a encontrarse bajo el cielo de Santander. Habrá reencuentros, emoción y, sobre todo, fútbol del que se queda en la memoria. Porque la Copa, en El Sardinero, siempre suena diferente.














