El Pleno del Ayuntamiento de Santander escenificó este jueves un intenso debate sobre el futuro de los Campos de Sport del Sardinero y el papel que debe jugar el Consistorio en la revisión del ambicioso plan presentado por el Real Racing Club. El documento, registrado la pasada semana en el Ayuntamiento y de más de 300 páginas, propone la modernización y ampliación del estadio municipal, con una inversión estimada de 68 millones de euros y un incremento de 4.000 asientos en su aforo actual. Sin embargo, la alcaldesa, Gema Igual, quiso rebajar las expectativas y aclarar su posición: “No es un proyecto, es un documento de base con contenido visual y conceptual, y no voy a adelantar valoraciones hasta analizarlo con prudencia”.
Durante la sesión, celebrada a petición de la oposición, Igual explicó que el Consistorio esperaba desde hacía más de una semana la presentación del documento y que, una vez recibido, “se analizará con detalle dentro de la próxima comisión de seguimiento del convenio” que regula la relación institucional entre el club y el Ayuntamiento. La regidora popular insistió en la necesidad de trabajar “sin precipitación” y con transparencia, afirmando que mantiene “una comunicación constante y fluida” con el presidente del Racing, Manolo Higuera, y que cualquier conclusión se trasladará primero al club antes de hacerla pública. “No quiero ni perjudicar ni ensombrecer un proyecto que puede ser muy ilusionante para la ciudad, pero hay que abordarlo con rigor técnico y sentido común”, apuntó.
La alcaldesa reiteró que el documento del Racing contiene abundante material gráfico y comparativo con otros estadios y entornos deportivos, pero que, desde el punto de vista técnico, “contiene menos información de la esperada” para considerarlo un proyecto formal. En esa línea, recordó que el Ayuntamiento ya ha puesto en marcha obras de mejora en el campo, como la licitación de la intervención en la cubierta o la ejecución del plan de accesibilidad, y advirtió de que “nadie debe ser tan ingenuo de pensar que un proyecto de esta envergadura no requiere financiación y plazos realistas”.
En el mismo pleno se debatió una moción presentada por los grupos del PSOE, PRC, Vox e Izquierda Unida que proponía la creación de una mesa de trabajo específica para analizar el anteproyecto, con representación del Ayuntamiento, el Racing, los partidos municipales, la Asociación de Peñas y colectivos vecinales. La iniciativa fue rechazada con los 14 votos en contra del Partido Popular, que gobierna con mayoría absoluta, frente al apoyo de los cuatro grupos de la oposición. Tal y como defendió Igual, “ya existe una vía de diálogo abierta con el club” y la supervisión del proyecto puede realizarse desde la Comisión de Desarrollo Sostenible, sin necesidad de crear nuevos órganos.
El ambiente del debate fue crítico por parte de la oposición y marcó las diferencias políticas en torno al papel que debe desempeñar el Ayuntamiento. Desde Izquierda Unida, su concejal, Keruin Martínez, calificó la propuesta del Racing de “interesante y ambiciosa” pero pidió “altura política e información pública”, advirtiendo que una iniciativa de tal magnitud “no puede desarrollarse de espaldas a la ciudadanía”. También reclamó evitar “sospechas o interpretaciones” sobre un proyecto privado en una instalación municipal, subrayando que, según el propio club, no solicitará financiación pública.
Desde el PRC, su portavoz, Vicente Nieto, criticó la “falta de compromiso” del equipo de Gobierno con el Racing e ironizó con lo que definió como “racinismo de escaparate” del PP. Recordó que los regionalistas han presentado en los últimos años varias mociones en apoyo al club “que siempre fueron rechazadas”, y exigió que el debate sobre El Sardinero se aborde con claridad y sin doble discurso. Por su parte, el portavoz socialista Daniel Fernández apoyó la creación de la mesa de trabajo y señaló que “no se trata de una revolución, sino de tener un espacio donde todos los actores puedan hablar y decidir con transparencia”.
También Vox intervino de forma favorable a la iniciativa. Su portavoz, Laura Velasco, consideró que “rechazar una propuesta sin siquiera conocerla no tiene sentido” y pidió al PP “dejar de ver esto en blanco y negro”. Defendió que el proyecto puede ser una “gran oportunidad” para revitalizar el estadio y su entorno, siempre que se aborde con criterios técnicos y participación de todos los colectivos implicados.
El debate comenzó con la intervención del concejal de Urbanismo, Agustín Navarro, quien cuestionó la naturaleza del documento presentado por el Racing. Según detalló, de las más de 130 páginas solo unas 60 son de texto, mientras que el resto se compone de imágenes promocionales, gráficos y comparativas. “Hay fotos de sobaos, de la playa de Langre o de anchoas, lo que no se corresponde con un anteproyecto técnico como tal”, apuntó, añadiendo que la estimación económica de 68 millones “no parece ajustada a la realidad” si se comparan los costes de infraestructuras deportivas de mayor dimensión, como San Mamés.
En su turno de réplica, Igual matizó esas apreciaciones, señalando que el objetivo del documento no es ser un proyecto de ejecución sino una propuesta conceptual “que permite abrir el diálogo sobre la futura remodelación del estadio”. Subrayó además que “el Ayuntamiento no ha cerrado puertas” y que se tratará de un proceso largo, en el que “se escuchará tanto a los técnicos como a la sociedad santanderina”. La alcaldesa también pidió al concejal de IU “que no utilice términos con connotaciones negativas como pelotazo o privatización cuando hablamos de una propuesta que puede ser positiva y bonita para la ciudad”.
En la recta final del debate, la regidora insistió en que, una vez estudiado el documento con detenimiento, se marcarán las bases para continuar con su desarrollo y definir las prioridades de intervención. “El proyecto debe ser estudiado sin prisas, con análisis económico y técnico riguroso, y con la vista puesta en garantizar la mayor transparencia y estabilidad de la colaboración entre el club y el Ayuntamiento”, remarcó Igual, quien insistió en que “el futuro de El Sardinero debe construirse con consenso”.
El pleno de este jueves evidenció que la propuesta del Racing va más allá de lo deportivo. La remodelación de los Campos de Sport del Sardinero se perfila como un asunto estratégico para la ciudad de Santander, tanto en lo urbanístico como en lo económico y social. Un proyecto que aspira a modernizar uno de los símbolos más emblemáticos de la capital y que, a juicio de todos los grupos, requiere diálogo, planificación y responsabilidad. Mientras tanto, el Ayuntamiento mantiene su compromiso de continuar el análisis técnico del documento presentado por el club y volver a abordar el asunto en la próxima comisión de seguimiento para definir los siguientes pasos.













