La Policía Local de Santander intensificó durante el pasado fin de semana su programa de acciones específicas de control, con el objetivo de prevenir accidentes de tráfico relacionados con el consumo de alcohol y drogas, así como mejorar la seguridad vial en la ciudad.
Dentro de los dispositivos de control de alcoholemia y sustancias estupefacientes, se realizaron un total de 105 pruebas, con un resultado de nueve positivos por consumo de alcohol —todas ellas infracciones administrativas— y tres positivos por consumo de estupefacientes, en concreto cocaína y THC.
Además, se llevaron a cabo controles específicos para frenar el consumo de alcohol en la vía pública, formulándose 36 denuncias por esta práctica en diferentes puntos del casco urbano.
En el marco de la campaña «Seguridad en Vehículos», los agentes también desplegaron dispositivos estáticos y dinámicos para detectar irregularidades en la circulación. Como resultado, se registraron 7 denuncias por circular sin seguro obligatorio, 24 por ITV caducada, 10 por carecer de documentación, 4 por uso del teléfono móvil durante la conducción y una más por no utilizar el cinturón de seguridad.
Por otro lado, el cuerpo municipal mantuvo activos los operativos de apoyo al transporte colectivo urbano, con la finalidad de evitar obstáculos que interfieran en el servicio y garantizar así el cumplimiento de horarios. En esta línea, se corrigió una infracción la semana pasada.
Asimismo, se reforzó la vigilancia sobre el uso adecuado de las plazas de estacionamiento reservadas a personas con discapacidad. En este caso, se corrigieron dos infracciones y un vehículo fue retirado por la grúa tras haber estacionado de forma indebida en una de estas plazas.
Con estos controles, el Ayuntamiento de Santander busca seguir avanzando en la mejora de la convivencia, la seguridad vial y el respeto a los colectivos más vulnerables.