La Audiencia Provincial de Cantabria ha decidido posponer el juicio contra un hombre acusado de cometer abusos sexuales reiterados contra su nieta, desde que la niña tenía tan solo siete años hasta los doce. La petición de la defensa de asignar un facilitador judicial al acusado ha sido el motivo esgrimido para este aplazamiento.
Según el escrito de la Fiscalía, el acusado, aprovechándose de su relación familiar y de que la menor convivía con él, habría sometido a la niña a tocamientos y penetraciones digitales de forma repetida. Estos hechos, según el Ministerio Público, habrían provocado en la menor un profundo trauma psicológico, compatible con un trastorno de estrés postraumático.
Ante la gravedad de los hechos, la Fiscalía solicita una condena de doce años de prisión para el acusado, además de diez años de alejamiento y prohibición de comunicarse con la menor. Asimismo, se reclama una medida de libertad vigilada de diez años una vez cumplida la pena y la inhabilitación para trabajar con menores.
Por su parte, la acusación particular, que representa al padre de la menor, se adhiere a las peticiones de la Fiscalía, exigiendo además una indemnización de 20.000 euros para la víctima por los daños morales sufridos.













