El Ejecutivo cántabro, liderado por el PP, sacará esta semana a información pública el anteproyecto del nuevo mapa concesional de transporte por carretera, una renovación que mantendrá básicamente las rutas actuales, introducirá algunas nuevas y reducirá las concesiones de 27 a seis grandes corredores unificados. Esta reforma pretende mejorar la rentabilidad de las líneas y evitar que los autobuses circulen vacíos gracias a la incorporación del transporte a demanda en ciertas rutas.
Entre las mejoras más destacadas está el doble incremento de frecuencias diarias en la conexión entre Potes y Unquera, así como entre Cabezón de la Sal y Renedo de Cabuérniga. También se proyecta aumentar un 60% los servicios que comunican Castro Urdiales con el Hospital de Laredo y un 14% los que unen Laredo con Ramales de la Victoria, ampliando atención a localidades como Limpias y Ampuero. Además, se contemplan nuevas rutas que conectarán Solórzano con Noja pasando por Beranga, Beranga con Somo y Solares por Cubas, y una línea diaria entre Unquera y San Vicente de la Barquera.
El coste anual estimado para mantener esta estructura supera los 16 millones de euros, de los cuales el Gobierno espera recuperar cerca de 10 millones gracias al aumento en frecuencias y mejoras en rutas. El déficit de unos 6 millones de euros que se registra actualmente será asumido por la administración. Estas cifras fueron detalladas por el consejero de Fomento, Roberto Media, quien además destacó que el mapa se ha diseñado en colaboración con la Universidad de Cantabria durante los últimos dos años.
El mapa concesional se organizará en seis corredores principales: occidental, que incluye 14 rutas y 8 a demanda que recorren los valles de Liébana, Nansa, Saja y la zona costera occidental; central, con 5 rutas regulares y 11 bajo demanda que abarcan Campoo-Los Valles, el Besaya y la conexión con Santander; Valles Pasiegos, con 13 y 5 rutas; oriental, que cubre Trasmiera, los valles del Asón y Agüera y la costa oriental con 17 rutas; y los de cercanías de Santander y Torrelavega, con 11 líneas cada uno que dan servicio al área metropolitana de estas ciudades.
El transporte a demanda funcionará con microbuses que se activarán con la solicitud de un solo usuario, evitando así partidas de autobuses con baja ocupación y optimizando recursos. El anteproyecto, que se publicará en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC) el miércoles 3 de diciembre, establece el número de servicios, si bien los horarios finales se definirán en la fase de licitación.
Una vez abierto el periodo de información pública durante 30 días y atendidas las posibles alegaciones, el documento pasará al Consejo de Gobierno para su aprobación definitiva, tras lo cual se prepararán los pliegos para sacar a licitación los contratos de transporte.
El consejero Media subrayó que esta actualización del mapa concesional era una asignatura pendiente, ya que el sistema vigente contaba con concesiones «caducadas hace más de una década» y gran parte del servicio era deficitario. Anteriormente, las 27 concesiones en vigor eran de tamaños y naturaleza muy diversa, desde grandes a pequeñas, lo que complicaba la gestión y la rentabilidad.
Los objetivos fijados para esta nueva planificación son ajustar la oferta a las demandas actuales de la población, mejorar la eficiencia del gasto público, asegurar la viabilidad económica para los operadores y ofrecer servicios más racionales, equitativos y de calidad. Además, Media destacó la importancia del transporte público por carretera como pieza clave para la cohesión territorial y la provisión de servicios esenciales.
Por último, resaltó que el uso del transporte público ha crecido un 18,5% desde 2023, y para finales de 2025 se prevé superar los 5,5 millones de viajeros, cantidad que supera en un 6% los niveles registrados antes de la pandemia, reflejando así una tendencia positiva en la demanda.














