La consejera de Ganadería de Cantabria, María Jesús Susinos, ha dirigido una carta al ministro de Agricultura, Luis Planas, instándole a cerrar fronteras ante la reciente reapertura de Francia a la exportación de ganado vacuno, una acción que pone en riesgo la salud de la cabaña ganadera española, especialmente en Cantabria, debido a la preocupante evolución de la Dermatosis Nodular Contagiosa (DNC) en territorio francés. Según Susinos, el levantamiento de restricciones por parte de Francia responde a intereses económicos y no a un control efectivo de la enfermedad, que sigue activa y sin estar erradicada completamente, hecho que puede implicar la llegada de animales vacunados pero aún portadores del virus a España, con grave peligro de contagio local.
La consejera ha destacado que esta enfermedad, de alta contagiosidad, no afecta a la salud humana pero supone un riesgo significativo para la ganadería, con consecuencias devastadoras en los animales, la economía y el estatus sanitario. Por ello, Cantabria ha solicitado al Gobierno central una actuación inmediata que incluya el cierre de fronteras para evitar la entrada de ganado procedente de zonas afectadas y que presione a la Unión Europea para coordinar una respuesta eficaz. Además, la comunidad mantiene estrictas medidas de prevención para preservar su cabaña bovina, que hasta ahora permanece libre de la enfermedad. María Jesús Susinos ha subrayado el compromiso del Gobierno cántabro con la protección del sector ganadero y ha hecho un llamamiento a la cooperación internacional para frenar la expansión de esta enfermedad, evitando decisiones que pongan en peligro la estabilidad económica y sanitaria del campo cántabro.













