La consejera de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria, María Jesús Susinos, ha mostrado este lunes su satisfacción tras conocer la decisión de la Fiscalía de Cantabria de archivar las diligencias abiertas contra ella y el director general de Montes y Biodiversidad, Ángel Serdio, al no encontrar indicios de delito en las actuaciones llevadas a cabo por su departamento en relación al control poblacional del lobo ibérico.
“Estoy muy satisfecha, especialmente por lo que esta resolución representa para el sector ganadero, que es fundamental para nuestra comunidad”, ha afirmado Susinos, que ha querido dejar claro que la Consejería actúa “dentro de la legalidad” y que continuará con los controles previstos “basados en criterios científicos y técnicos”.
La titular de Ganadería ha insistido en la necesidad de buscar un equilibrio entre la preservación de la especie y la defensa de la actividad ganadera. “No queremos eliminar al lobo de nuestro entorno, pero tampoco podemos permitir que la presencia del lobo acabe con nuestras explotaciones ganaderas”, ha remarcado.
Susinos ha recordado que solo en el último año se registraron más de 2.500 ataques de lobo en Cantabria, que se saldaron con la muerte de más de 3.200 animales, una cifra que refleja el impacto directo en el medio rural. Además, ha señalado que la población de lobos se ha incrementado en un 92% en la última década, hasta alcanzar 23 manadas distribuidas por el 80% del territorio regional, incluidas algunas áreas costeras.
En este contexto, la consejera ha defendido que el control poblacional del lobo “es una herramienta necesaria” para garantizar la convivencia entre la fauna silvestre y el desarrollo de la ganadería extensiva. Según ha explicado, el plan autonómico contempla la posibilidad de realizar extracciones controladas de hasta un 20% de la población, lo que permitiría mantener la estabilidad actual del número de ejemplares.
“La decisión de la Fiscalía viene a confirmar que nuestras actuaciones se están llevando a cabo con el máximo rigor y conforme a la normativa vigente. Vamos a seguir trabajando por un campo vivo, en el que puedan coexistir la biodiversidad y la actividad ganadera”, ha concluido Susinos.