El Ayuntamiento de Laredo ha dado luz verde al proceso para renovar el Plan Especial de la Puebla Vieja, una herramienta urbanística clave que llevaba más de dos décadas sin actualizarse. La Junta de Gobierno Local aprobó este lunes los pliegos necesarios para licitar la redacción del nuevo documento, con un presupuesto previsto de 66.500 euros.
Además, se ha validado la documentación complementaria para iniciar la evaluación ambiental estratégica, un trámite obligatorio para avanzar en la elaboración del nuevo plan.
El actual documento, en vigor desde 1999, ha quedado claramente desfasado, según ha explicado el Consistorio, al no responder a las necesidades actuales ni cumplir con los objetivos para los que fue concebido. Por ello, el equipo de Gobierno considera “prioritario” actualizar el planeamiento con un enfoque que combine la protección del patrimonio con la regeneración urbana.
Este tipo de planes están pensados para ordenar y regular espacios de especial valor cultural e histórico, como el casco antiguo laredano. En este caso, el objetivo es fijar criterios claros para la conservación del patrimonio, la rehabilitación de edificios, la mejora del espacio público y la compatibilidad de nuevos usos con el entorno protegido.
El alcalde de Laredo, Miguel González, ha destacado que este paso supone “un avance enorme hacia la recuperación real de la Puebla Vieja”, un espacio emblemático cuya transformación considera esencial. “Han pasado más de veinte años sin pensar a fondo en este lugar, y ya era hora de abordar su futuro con una mirada actualizada”, ha afirmado. A su juicio, el nuevo plan debe servir como “una base sólida que permita conservar la identidad de la Puebla Vieja y, al mismo tiempo, abrirle la puerta a nuevas oportunidades”.