Cantabria se encuentra hoy bajo alerta meteorológica debido a los fuertes vientos de componente sur que afectan a toda la región, alcanzando velocidades de hasta 120 kilómetros por hora en zonas altas. Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), la alerta es de nivel naranja en el mar, Cantabria del Ebro y Liébana, mientras que en el resto de la comunidad se mantiene en nivel amarillo.
El viento, que también complica las condiciones marítimas, ha registrado durante la madrugada fuerza 8 y, ocasionalmente, fuerza 9 en el litoral cántabro. Aunque la intensidad disminuirá a partir de las 15:00 horas, la AEMET advierte de olas de entre 4 y 5 metros mar adentro, lo que mantendrá la alerta amarilla durante toda la jornada del lunes.
Mañana lunes continuarán los avisos por viento, con rachas que podrían alcanzar los 90 km/h en el interior, exceptuando el litoral.
Riesgo de incendios y múltiples incidencias
Ante las condiciones extremas, la Dirección General de Montes y Biodiversidad ha activado el nivel 2 de alerta por riesgo elevado de incendios en cuatro comarcas forestales.
Entre las 19:00 horas de ayer y las 7:00 horas de hoy, el Centro de Atención de Emergencias ha registrado 44 llamadas y coordinado 21 incidencias relacionadas con los fuertes vientos. La mayoría de las intervenciones se han concentrado en el interior de Cantabria, donde se han producido caídas de árboles, obstáculos en carreteras y desprendimientos en infraestructuras.
En Caviedes, el viento derribó un tren de lavado en una estación de servicio, mientras que en Cabezón de la Sal, los bomberos aseguraron una chapa suelta de un tejado con riesgo de caída. Por su parte, en Los Corrales de Buelna, efectivos trabajaron durante la madrugada para garantizar la seguridad en una zona urbana afectada por el desprendimiento de trozos de fachada.
Recomendaciones a la población
Desde el 112 y la Dirección General de Seguridad y Protección Ciudadana se recomienda a los cántabros:
- Asegurar puertas, ventanas y objetos exteriores.
- Mantenerse alejados de árboles, cornisas y muros que puedan desprenderse.
- Extremar la precaución en desplazamientos y evitar zonas en construcción.
Además, ante el riesgo de incendios, se solicita la colaboración ciudadana para denunciar comportamientos sospechosos y, en el caso de observar llamas, informar inmediatamente.
Para quienes vivan en zonas costeras, se insiste en evitar malecones, espigones y playas, así como estacionar vehículos en lugares expuestos al oleaje.












