El comité de empresa de los bomberos del Servicio de Emergencias de Cantabria (SEMCA) ha comunicado este martes que no realizarán más horas extraordinarias estructurales hasta que se cubran las vacantes por bajas, permisos y licencias, y se solucione la crónica escasez de efectivos. La decisión, aprobada por casi el 90% en una asamblea de trabajadores, responde al «desastre» en la gestión del servicio, según los sindicatos UGT, CSIF y SIEP, que lamentan que ya haya parques cerrados por no alcanzar la guardia mínima de cuatro bomberos exigida por sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria.
Este mismo martes, los parques de Reinosa, Villacarriedo y Valdáliga no han estado operativos por falta de personal, mientras que el de Los Corrales de Buelna permanece cerrado. «No contratan, no cubren bajas, no actualizan protocolos, no pagan las horas extras pendientes y se niegan a firmar un convenio caducado desde hace 12 años», resume el comité en un comunicado, en el que acusa al Gobierno de la comunidad autónoma de «dejadez» pese a promesas iniciales de negociación. Han intentado cerrar un acuerdo durante una década en distintas legislaturas, con avances que siempre se truncan «a la hora de la verdad», como un «cerrojazo» reciente de la empresa.
El comité critica las anulaciones de reuniones convocadas con la consejera de Presidencia, Isabel Urrutia —dos citadas y canceladas, la última por email con horas de aviso—, y denuncia que la única respuesta del SEMCA sea forzar horas extras o desplazar bomberos entre parques en una «política de parches». Además, saltan resoluciones de Inspección de Trabajo que prohíben esas horas estructurales programadas, mientras la oferta de empleo público está paralizada por denuncias y las bolsas de interinos incluyen personal sin formación adecuada. «Siempre culpan a los bomberos de su mala gestión», reprochan.
Los representantes sindicales insisten en que el servicio está «en caos», con protocolos obsoletos y sin refuerzos pese a compromisos. Exigen un convenio digno que regule condiciones laborales y garantice el funcionamiento óptimo para la ciudadanía, objetivo «merecido» tras años de precariedad. Mientras, el Gobierno ha anunciado para este miércoles la convocatoria de 20 nuevas plazas de bomberos, en un intento por suplir carencias y cumplir la sentencia judicial sobre guardias mínimas.














