El Rayo Cantabria y la UD Sámano protagonizaron sendos encuentros en la última jornada de la Segunda Federación, demostrando la intensidad y la competitividad que caracterizan a esta categoría. El Rayo Cantabria empató a dos goles con el Unión Popular de Langreo en el Nuevo Gánzabal, un partido marcado por la insistencia de los cántabros y un final vibrante donde Baldrich anotó un penalti en el descuento para rescatar un punto que parecía perdido. A pesar de haber ido perdiendo tras remontadas rápidas de los locales, el filial racinguista mostró carácter y no bajó los brazos, reflejando un fuerte compromiso con la competición.
Por su parte, la UD Sámano no pudo aprovechar la condición de local y cayó derrotada por 0-2 frente al Salamanca UDS, un campo con césped sintético que históricamente les ha costado adaptar su juego. El equipo blanquinegro, pese a su esfuerzo y presión alta que mantuvo al rival recluido en su área en la primera parte, no pudo evitar los goles de Carrasco y Mancebo, con este último sentenciando en el añadido mediante un penalti. Esta derrota refleja las dificultades del Sámano por mantener la regularidad, aunque sigue mostrando voluntad y trabajo para superar los retos de esta exigente categoría.
EMPATE DEL RAYO
Los cántabros y asturianos volvieron a medirse en un duelo que reflejó la igualdad y la intensidad de la Segunda Federación, grupo I, con ambos conjuntos buscando la primera victoria fuera de casa. Rayo Cantabria y Unión Popular de Langreo protagonizaron un partido peleado de principio a fin, lleno de alternativas y con un final emocionante que dejó un empate justo en el marcador.
Desde los primeros minutos, el encuentro se mostró equilibrado con un Langreo intentado imponer su juego en su cancha del Nuevo Gánzabal, mientras que los visitantes de Ezequiel Loza buscaban abrir brechas con rápidas transiciones y juego elaborado. La primera mitad concluyó sin goles en un intercambio constante de intentos que no tenían la precisión necesaria para romper la igualdad hasta que Baldrich, en el 48, logró marcar para los visitantes con una acción a balón parado que adelantó al filial racinguista.
Sin embargo, la reacción del Langreo no tardó en llegar y en cuestión de minutos, primero René y luego un segundo tanto suyo en el minuto 60, dieron la vuelta al electrónico y pusieron en ventaja a su equipo. Lejos de venirse abajo, el Rayo Cantabria aumentó la intensidad ofensiva y presionó sin descanso buscando la igualada. Esta resiliencia fue recompensada en los minutos finales cuando el árbitro señaló penalti a favor de los cántabros en el tiempo de descuento, un minuto crucial donde Baldrich no falló desde los once metros para sellar un empate que resultó de justicia para un equipo que no bajó los brazos.
El entrenador Ezequiel Loza, que hizo tres cambios en el once inicial respecto al partido anterior, destacó la entrega y el nivel competitivo del equipo. Reconoció que merecieron la victoria y valoró el trabajo colectivo que les permitió mantener opciones hasta el último segundo, animando a su plantilla a continuar creciendo y manteniendo esa dinámica en los compromisos venideros. Este punto rescatado en una cancha difícil como la del Langreo mantiene al Rayo Cantabria en una posición competitiva dentro del Grupo I, con la convicción de seguir peleando en cada encuentro.
EL SÁMANO PIERDE EN SALAMANCA
Después de más de un año sin celebrar victorias en campos de hierba artificial, el Salamanca UDS logró imponerse con autoridad por 0-2 ante el UD Sámano, que jugó en su feudo de Vallegón. El terreno sintético, que tantas complicaciones le había generado al conjunto salmantino en temporadas anteriores, no fue impedimento para que los visitantes dominaran la mayor parte del encuentro. El equipo blanquinegro apostó por controlar la posesión y mantener una presión elevada, ahogando al Sámano en su propio campo durante largos periodos.
El primer tiempo estuvo marcado por la lucha y un ritmo pausado que no permitió mayores ocasiones claras, pero el Sánchez dejó muestras de su intención de dominar el partido. La apuesta táctica de Jorge García, que liberó los laterales y situó a Carrasco y Abraham en posiciones ofensivas muy activas, hizo que el equipo charro buscase constantemente romper el cerrojo de la defensa local. El Sámano resistía sin conceder demasiadas opciones, defendiendo con uñas y dientes en un escenario que mezcla la simplicidad del campo con la dureza propia de la categoría.
En la segunda mitad, el Salamanca intensificó su dominio y fue más efectivo en las áreas. Carrasco abrió el marcador en el minuto 50, mandando un balón al segundo palo en una jugada de estrategia, mientras que Mancebo sentenció en el 94 al transformar un penalti, cerrando el resultado y despejando cualquier intento de remontada del Sámano.