La presidenta del Partido Popular y del Gobierno de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha lanzado este miércoles un duro alegato contra el Ejecutivo central, al que acusa de “dividir y enfrentar a los españoles” mientras “pone en riesgo el Estado de las Autonomías”. Frente a lo que considera un “Gobierno agotado y caótico”, defendió que el PP es “el primer partido de España y el que representa el futuro”.
Buruaga advirtió que Pedro Sánchez está al frente de un “desastre” porque, según dijo, “nada de lo que depende de él ni de sus ministros funciona”. En este sentido, citó los fallos en suministros básicos, el colapso de transportes y la falta de eficacia en la protección de las mujeres víctimas de violencia machista. Sobre este último punto, calificó de “negligencia intolerable” la gestión estatal y pidió “soluciones y dimisiones”, criticando además el “feminismo de pancarta” que, afirmó, practica el Gobierno socialista. También exigió conocer por los cauces oficiales el número de mujeres afectadas en Cantabria y la respuesta que se les ha dado.
La líder popular abordó igualmente la inmigración, a la que definió como “un reto de país” que no puede resolverse con el “inmovilismo del PSOE ni la radicalidad de Vox”. Reclamó una política “seria y equilibrada”, donde decidir quién entra en España y bajo qué condiciones esté ligado al cumplimiento de obligaciones.
Al referirse a la situación de la comunidad, defendió que “Cantabria avanza con paso firme hacia un futuro mejor” gracias al “cambio de rumbo” que impulsa su Ejecutivo, con signos de mejora en empleo, inversión y confianza económica. Sostuvo que su Gobierno “no se resigna” y recalcó que la primera Ley Integral de Vivienda de Cantabria garantiza el acceso a una vivienda digna a precios asequibles. “Somos ejemplo de cumplimiento y responsabilidad”, afirmó, en alusión a la mayoría parlamentaria que permite al PP aprobar leyes sin renunciar a su programa.
Sobre los próximos presupuestos autonómicos, reconoció que serán “una prueba difícil” al coincidir con el arranque del ciclo electoral. Aun así, dijo que el PP trabajará con “sensatez, diálogo y visión de comunidad”, y pidió a la oposición que “no bloquee las soluciones que Cantabria necesita”.
La presidenta fue especialmente crítica con el Ministerio de Transportes, al que acusó de incumplir sus compromisos con las infraestructuras ferroviarias. Aseguró que “los cántabros estamos cansados de atropellos” y reprochó al PRC sus antiguos apoyos a Sánchez: “El fiasco de los trenes que no llegan es suyo, no mío. Yo nunca le he votado a Sánchez sus decretos, los regionalistas sí”.
Exigió al Gobierno un acuerdo escrito que garantice que el tren mixto de mercancías y pasajeros con destino Bilbao parta desde Santander y que los trenes de cercanías estén en marcha en 2026. Advirtió de que, de seguir los incumplimientos, se replanteará su relación con Fomento.
“España no puede maltratar a tierras como Cantabria, que trabajan lealmente por el proyecto común, mientras los que la atacan reciben privilegios como el cupo separatista o la condonación de deuda”, denunció. Para concluir, aseguró que el PSOE encara “su cuenta atrás” y reclamó estar preparados para un “cambio profundo y regenerador que solo puede venir de la mano del Partido Popular y de Alberto Núñez Feijóo”.