La piscina de verano de Puente San Miguel ha vuelto a cerrar sus puertas de manera temporal tras detectarse un nuevo acto incívico que ha obligado a paralizar su uso. Según informaron fuentes municipales del Ayuntamiento de Reocín, durante este fin de semana apareció una bolsa con heces colgada en la escalerilla del vaso principal, un gesto vandálico que ha desencadenado la activación inmediata del protocolo sanitario.
Ante esta situación, los responsables de la instalación han iniciado el proceso de depuración completo del agua y realizarán las pruebas necesarias para descartar la presencia de la bacteria E.Coli, lo que mantendrá cerrada la piscina durante varios días. Desde el Ayuntamiento lamentan profundamente estos hechos, que ponen en riesgo la salud pública y perjudican a todos los usuarios que disfrutan de esta instalación.
Además, el Consistorio ha anunciado que se revisarán las grabaciones de las cámaras de seguridad para tratar de localizar a los responsables de este acto, al tiempo que recuerdan la importancia de respetar las normas y cuidar un espacio que es de uso colectivo y beneficio para toda la comunidad.