La Policía Local de Santander llevó a cabo durante el pasado fin de semana una serie de dispositivos de control con el objetivo de reforzar la seguridad vial y prevenir accidentes relacionados con el consumo de alcohol y drogas al volante. En estos operativos se realizaron un total de 24 pruebas de alcoholemia, de las cuales 10 resultaron positivas, aunque todas fueron de carácter administrativo. Además, se detectaron tres positivos en sustancias estupefacientes: uno en THC, otro en cocaína y un tercero en una combinación de cocaína, THC y anfetaminas.
En paralelo, los agentes también intensificaron la vigilancia sobre el consumo de alcohol en la vía pública, interponiendo 61 denuncias a ciudadanos que fueron sorprendidos bebiendo en espacios no permitidos.
Por otro lado, dentro del programa de seguridad vial, la Policía Local estableció controles tanto estáticos como dinámicos, con el fin de mejorar el tráfico y garantizar el cumplimiento de la normativa. Como resultado, se formularon 5 denuncias por carecer de seguro obligatorio, 28 por circular con la ITV caducada, 5 por falta de documentación, 5 por el uso del teléfono móvil al volante y 2 por no llevar puesto el cinturón de seguridad.
En lo que respecta al transporte público urbano, se mantiene un operativo de apoyo destinado a eliminar obstáculos en el recorrido de los autobuses municipales, con el propósito de mejorar la puntualidad de las líneas y facilitar el servicio a los usuarios. En la última semana se corrigió una infracción dentro de este dispositivo.
Asimismo, durante el fin de semana se impusieron sanciones relacionadas con ruidos en la vía pública y en viviendas. El sábado por la mañana, un hombre de 70 años fue identificado y denunciado en la calle Juan de Borbón por circular en bicicleta con música a gran volumen, generando molestias a los viandantes. Por la noche, en la avenida Reina Victoria, los agentes sancionaron a un establecimiento hostelero por no disponer de hojas de reclamaciones, no exhibir el cartel de licencia y no presentar la Licencia de Apertura.
Finalmente, en la madrugada del lunes, la Policía intervino en una vivienda de la calle Rubio tras recibir quejas vecinales por ruidos molestos. Un hombre de 63 años fue identificado y denunciado por alterar el descanso con música y voces en tono elevado.