La presentación del presupuesto de 2025 por parte del equipo de gobierno de Santander ha generado un rechazo en bloque de los grupos de la oposición en el Ayuntamiento. Izquierda Unida (IU), VOX y el Partido Regionalista de Cantabria (PRC) han coincidido en denunciar la falta de transparencia, la baja ejecución de partidas anteriores y la ausencia de proyectos transformadores, a la vez que han presentado alternativas y propuestas que, en su opinión, responderían mejor a las necesidades de los santanderinos y mejorarían la calidad de vida en la ciudad.
Izquierda Unida pide mayor inversión en educación, vivienda y movilidad
Izquierda Unida ha propuesto enmiendas parciales por valor de 6,3 millones de euros, dirigidas principalmente a las áreas de educación, vivienda y movilidad. Entre las medidas más destacadas, el concejal Keruin Martínez ha solicitado 700.000 euros para poner en marcha un plan de diagnóstico sobre el estado de los colegios de la ciudad y la implementación de entornos escolares seguros. “Los problemas en la infraestructura educativa son constantes, y un plan adecuado permitiría atenderlos con urgencia y planificar reformas más profundas a medio plazo”, señaló Martínez, subrayando la necesidad de proteger a los estudiantes mediante una reordenación del tráfico y limitaciones de acceso a vehículos privados cerca de las escuelas.
En cuanto a vivienda, Martínez ha propuesto destinar un millón de euros para que la Sociedad de Vivienda y Suelo (SVS) adquiera propiedades destinadas al alquiler social, con el objetivo de aliviar la creciente demanda de vivienda asequible en la ciudad. «Es fundamental que el Ayuntamiento utilice todas las herramientas disponibles, como la SVS, para crear un verdadero parque público de vivienda, y no solo operar como una promotora inmobiliaria», indicó el concejal. IU también propone la creación de un protocolo para la gestión de desahucios en colaboración con el Colegio de Abogados de Santander, con el fin de apoyar a las familias en riesgo.
La formación de izquierdas también ha planteado una inversión de 600.000 euros para la instalación de marquesinas en las líneas de autobuses de los barrios periféricos, argumentando que, mientras algunas zonas del centro tienen una infraestructura sobrada, muchos barrios siguen sin servicios básicos de movilidad.
Además, IU ha propuesto destinar 3,1 millones de euros para desarrollar un plan de aprovechamiento de agua de lluvia, en respuesta al derroche de agua potable que actualmente se utiliza para riego y limpieza de calles. “Este proyecto no solo supone un ahorro importante, sino que contribuiría a una gestión más sostenible de los recursos de la ciudad”, agregó Martínez, quien también propuso redirigir los 35.000 euros anuales asignados a la Plaza de Toros hacia la compra de libros para las bibliotecas municipales. En materia de memoria histórica, IU también propuso una partida simbólica para cambiar placas y nombres de calles que aún incumplen la Ley de Memoria Democrática.
VOX denuncia la opacidad y el “derroche ideológico” del presupuesto
Por su parte, el grupo municipal de VOX ha presentado una enmienda a la totalidad del presupuesto, calificándolo de «opaco» y lleno de “partidas genéricas” que, según la portavoz Laura Velasco, dificultan la fiscalización y aportación de propuestas. Velasco ha criticado que el gobierno municipal no haya detallado las cuentas en comisiones o en pleno, a pesar de haber solicitado información específica en tres ocasiones, lo que considera una muestra de falta de transparencia por parte del equipo de la alcaldesa Gema Igual.
VOX también ha señalado como “gastos superfluos e ideológicos” partidas destinadas a proyectos como los «Puntos Violeta», la Agenda 2030 y la Zona de Bajas Emisiones, y ha cuestionado la subvención de 211.000 euros a ayudas de solidaridad para el Tercer Mundo, fondos que, en su opinión, deberían dirigirse prioritariamente a resolver los problemas locales de Santander.
La portavoz también ha criticado la financiación de 60.000 euros para organizaciones supramunicipales como la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), argumentando que estas instituciones “quitan competencias al municipio y restan capacidad de autogestión al Ayuntamiento”.
PRC critica la baja ejecución de inversiones y la falta de proyectos transformadores
El Partido Regionalista de Cantabria (PRC), liderado por su portavoz Felipe Piña, también ha presentado una enmienda a la totalidad del presupuesto, argumentando que el documento no responde a las necesidades de los vecinos y carece de proyectos transformadores para el desarrollo de la ciudad. Piña ha denunciado la baja ejecución de inversiones en ejercicios anteriores, recordando que apenas se ejecuta un 19-20% de lo previsto anualmente, lo que “subraya la incapacidad de gestión del equipo de gobierno”.
El portavoz regionalista ha mencionado proyectos concretos comprometidos y aún no realizados, como la mejora de viales en barrios periféricos y la creación de un centro cívico en Nueva Montaña, así como otros que han sido completamente desatendidos, como la rehabilitación del Barrio Pesquero o la implementación de un plan de inversión en colegios. Según Piña, esta situación lleva a que la ciudad “pierda población, disminuya su seguridad y carezca de oportunidades de empleo”.
Piña también ha reprochado al gobierno municipal su falta de transparencia, criticando que el presupuesto fuera presentado primero a la prensa y que la alcaldesa no haya convocado a los portavoces de la oposición para detallar el documento. Para el PRC, la falta de transparencia y la baja ejecución de inversiones significan que los impuestos de los ciudadanos no se están destinando a proyectos con un impacto real en su calidad de vida.
Unidos por un modelo de ciudad que priorice el bienestar ciudadano
A pesar de sus diferencias ideológicas, los tres grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Santander han coincidido en que el presupuesto presentado para 2025 no aborda los problemas básicos de la ciudad ni tiene en cuenta las demandas de los ciudadanos. IU, VOX y PRC han expresado su voluntad de negociar medidas que fomenten una gestión eficiente y pongan en el centro las necesidades de los vecinos, con inversiones que den respuesta a problemas concretos de movilidad, educación, vivienda y sostenibilidad.
En sus enmiendas y propuestas alternativas, estos partidos han planteado un modelo de ciudad en el que se dé prioridad al bienestar de los santanderinos, abogando por una mejor ejecución del presupuesto y un uso más eficiente y responsable de los recursos públicos.