La Autoridad Portuaria de Santander (APS) ha puesto en marcha los trabajos de dragado de la canal de navegación entre Punta Rabiosa y Somo, una intervención clave que se prolongará hasta 2030 con un coste total de 1,68 millones de euros. La empresa CIOMAR S.L. se encarga de la operación, que contempla extraer 20.000 metros cúbicos de arena al año en cinco campañas sucesivas, dejando la cota mínima de utilización en -1,5 metros respecto al cero del puerto. Se actuará en los tramos más afectados según su estado actual, eliminando acumulaciones que en ocasiones fuerzan a las embarcaciones a aguardar la pleamar máxima para evitar tocar fondo.
El presidente de la APS, César Díaz, ha resaltado que esta medida resulta «imprescindible» para potenciar la conectividad interior y asegurar la continuidad de servicios esenciales como el transporte de pasajeros o el acceso a instalaciones náuticas. Estas acumulaciones de arena, derivadas de la dinámica natural de la bahía, generan problemas recurrentes que afectan la operativa diaria de barcos pequeños y medianos, obligando a maniobras complicadas o esperas que restan eficiencia al tráfico marítimo local.
La iniciativa se inscribe en las acciones de gestión del sistema de playas Somo-Laredo, buscando equilibrar los sedimentos y mantener la navegabilidad en una zona vital para el ocio náutico y el transporte costero. Díaz ha insistido en que el dragado no solo resuelve cuellos de botella inmediatos, sino que contribuye a la estabilidad a largo plazo de la bahía, evitando riesgos para las embarcaciones recreativas y profesionales. La APS prevé que las obras, repartidas en anualidades, respondan con agilidad a la evolución del fondo marino, adaptando cada campaña a las necesidades reales detectadas.
Además de mejorar la seguridad y fluidez, el proyecto refuerza el atractivo de la zona para el turismo náutico, un motor económico clave en la comunidad autónoma. Fuentes portuarias explican que mantener la canal en óptimas condiciones previene incidentes como varadas que podrían dañar cascos o propulsores, y facilita el acceso a amarres y servicios en Somo. La colaboración con CIOMAR garantiza técnicas eficaces y respetuosas con el entorno marino, depositando los sedimentos en zonas autorizadas para no alterar ecosistemas cercanos.
Con este plan hasta 2030, la APS da continuidad a su estrategia de mantenimiento preventivo, alineada con las demandas de usuarios y operadores locales. Díaz ha recordado que estas actuaciones responden a estudios hidrodinámicos que identifican las zonas críticas, asegurando que el presupuesto de 1,68 millones optimice el impacto en conectividad y economía azul. La bahía de Santander, con su tráfico mixto de ferry, pesca y recreo, sale ganando en fiabilidad operativa, lo que beneficiará tanto a residentes como a visitantes que dependen de esta ruta marítima esencial.












