Izquierda Unida de Cantabria ha reforzado su denuncia presentada la semana pasada ante la Fiscalía, ampliando la denuncia para incluir casos de retrasos significativos en la detección precoz de cáncer de cérvix y colon, además del cáncer de mama. Israel Ruiz Salmón, coordinador autonómico, destacó que ya hay afectados que no recibieron la invitación para realizar pruebas clave dentro del programa de cribado, un hecho que pone en jaque la eficacia del sistema sanitario regional y la salud de miles de personas.
El partido también cuestiona la versión oficial del consejero de Salud, César Pascual, sobre una demora media de dos meses en los diagnósticos, denunciando que en muchos casos la espera se extiende hasta seis u ocho meses. Como ejemplo, mencionan el caso de una mujer que, tras realizarse una mamografía en agosto, recibió una carta para repetir pruebas solo tras la denuncia ante la Fiscalía, lo que evidencia una tardanza de más de tres meses sin ninguna información que alivie la incertidumbre.
Según IU, estos retrasos no son un problema puntual sino una situación sistemática y planificada que pone en riesgo la salud pública, vulnera el derecho a la sanidad y la equidad en el acceso. La formación pide que se investiguen responsabilidades administrativas y penales en la gestión del Servicio Cántabro de Salud, y denuncia la privatización progresiva de servicios con la derivación de mil mamografías al hospital privado Santa Clotilde, lo que consideran una estrategia para debilitar el sistema público.
Además, alertan sobre posibles delitos de homicidio y lesiones imprudentes por omisión, en caso de que los retrasos hayan provocado diagnósticos tardíos con agravamiento clínico. También señalan la posible prevaricación administrativa por decisiones como no cubrir bajas ni reforzar servicios ante la acumulación de pruebas pendientes. IU reclama la comparecencia de responsables sanitarios y afectados para esclarecer estos hechos.
Esta denuncia incrementa la presión política sobre el Ejecutivo autonómico, que admite algunos retrasos pero defiende que está implementando medidas para mejorar la eficacia del cribado. El debate pone en evidencia la necesidad de garantizar la sostenibilidad y calidad de la sanidad pública, comprometida por la externalización y las largas esperas en un sistema clave para la detección temprana del cáncer.