La Real Sociedad Gimnástica de Torrelavega se encuentra en una fase decisiva para su porvenir, según ha comunicado la Junta Directiva, que preside Siro del Barrio Menéndez. Tras años en los que la asfixiante deuda amenazó seriamente la continuidad del club, la directiva asegura haber dejado ya encauzada su cancelación, a la espera solo de los últimos trámites administrativos, concretamente la cesión de locales municipales en los bajos del Malecón, un paso administrativo clave para poder saldar finalmente esta deuda histórica.
El mandato actual, iniciado en 2021 en un contexto marcado por la incertidumbre y problemas económicos heredados, puso como máxima prioridad sanear las cuentas y liberar al club de una losa financiera que durante décadas había lastrado su desarrollo deportivo y su vida institucional. La deuda condicionó el funcionamiento ordinario de la entidad y limitó gravemente su capacidad competitiva, obligando a la Junta Directiva a dedicar sus esfuerzos a garantizar la supervivencia de la Gimnástica por encima de cualquier otro objetivo.
Desde la entidad se subraya que, una vez concretada la cancelación, se abrirá una etapa que consideran ilusionante y fundamental para asegurar no solo la viabilidad futura del club sino también su normal funcionamiento. El fin de la deuda permitirá destinar recursos a la actividad diaria y planificar nuevas iniciativas que beneficien tanto a la afición gimnástica como al conjunto de la ciudad y la comarca del Besaya, apostando por proyectos de mayor envergadura que ahora sí podrán impulsarse sin el freno económico de los años anteriores.
Con la estabilidad financiera como nuevo punto de partida, la actual Junta Directiva asume que el siguiente paso natural será convocar elecciones, conforme a lo marcado por los estatutos, para que la masa social de la Gimnástica sea quien decida el rumbo futuro del club. Se comprometen, además, a mantener a los socios informados del proceso y a garantizar la participación de todos en unas elecciones transparentes, entendiendo que, tras años difíciles, es el momento de definir colectivamente el proyecto de club que desean para los próximos años.
La Junta concluye reafirmando que ésta es una oportunidad de iniciar una nueva página en la vida de la Gimnástica, dejando atrás las urgencias económicas y enfocando sus energías en consolidar un club sostenible, competitivo y orgulloso de su historia, plenamente vinculado a la ciudad y al tejido social del Besaya.