El delegado del Gobierno en Cantabria, Pedro Casares, ha anunciado que durante 2025 el Ejecutivo central ejecutará una inversión superior a los 144 millones de euros en actuaciones sobre la Red de Carreteras del Estado en la región. Entre los proyectos más relevantes que ya están en marcha o han sido inaugurados recientemente destacan el ramal de continuidad Sierrapando-Barreda, la reforma integral del Desfiladero de la Hermida y la ampliación de la capacidad de la A-67 entre Polanco y Santa Cruz de Bezana, con una inversión que supera los 170 millones de euros. Casares destacó además que se está interviniendo en la mejora de varios túneles de la red estatal, con un presupuesto cercano a los 50 millones, y que todas estas obras finalizarán antes de diciembre.
En materia ferroviaria, Casares hizo hincapié en el “gran proyecto” encarado por el Gobierno para modernizar la red de cercanías en Cantabria, que cuenta con un plan de inversiones valorado en 1.600 millones. De esta cifra, ya se han ejecutado o están en cursos actuaciones por 700 millones, un avance notable comparado con la ausencia casi absoluta de inversiones en años anteriores. Entre los proyectos, destacó el contrato para la adquisición de nuevos trenes, actualmente en fabricación, y confirmó que el servicio ferroviario seguirá siendo gratuito hasta que lleguen las nuevas unidades, previstas para el primer semestre de 2026.
Asimismo, valoró el impulso en la llegada de la Alta Velocidad a Reinosa, un proyecto que, según explicó, “goza de una salud extraordinaria” y está avanzando con muchas tramos en ejecución, licitación o estudio. En cuanto al tren entre Santander y Bilbao, Casares aseguró que es un compromiso firme del Gobierno y que se trabaja para su viabilidad y pronta ejecución, dejando claro que si hoy se debate sobre la forma de implementar el proyecto es porque la decisión política para llevarlo a cabo ya está tomada.
La candidata del PRC a la Presidencia de Cantabria, Paula Fernández, que mantuvo un encuentro con Casares para abordar estas y otras cuestiones, incidió en la importancia de acelerar la puesta en servicio de los nuevos trenes de cercanías y defendió un estudio integral para la conexión ferroviaria con Bilbao, que valore la cohesión territorial y no solo aspectos económicos. También expresó su preocupación por la posible exclusión de Reinosa del trazado final del AVE y solicitó la recuperación de la parada del Alvia en la capital campurriana, esencial para la población de Campoo y áreas cercanas. En materia de infraestructuras viarias, Fernández urgió la finalización de las obras en los túneles de la autovía A-67, cuyo retraso está afectando a vecinos desde hace más de dos años, y pidió agilidad para las obras del tercer carril en la autovía Torrelavega-Santander, necesarias para mejorar la movilidad y seguridad vial.
Tanto Casares como Fernández resaltaron la importancia del diálogo y la colaboración entre administraciones para avanzar en estos proyectos y atender las demandas de la ciudadanía. Mientras la regionalista afirmó que seguirán siendo una fuerza reivindicativa pero dialogante, el delegado defendió que la sociedad cántabra reclama un clima de entendimiento y acuerdos para lograr el desarrollo que necesita la comunidad. Tras su nombramiento, Casares expresó su interés en reunirse con la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, y lamentó la falta de respuesta a su solicitud enviada en agosto para abordar temas urgentes para la región.
En resumen, este año 2025 Cantabria experimenta una inversión sin precedentes en su infraestructura estatal, con obras fundamentales que mejorarán la conexión, la movilidad y la calidad del transporte tanto por carretera como por ferrocarril, apuntando a un futuro de crecimiento y modernización en la Comunidad Autónoma.