Los alumnos del Taller de Cerámica del Centro Cultural La Vidriera, en Camargo, han llevado a cabo una propuesta artística sin precedentes en la región: la inmersión en el mar de 70 ánforas elaboradas por ellos mismos. Esta iniciativa, respaldada por el Ayuntamiento de Camargo, cuenta con la colaboración del Club Náutico Marina del Cantábrico y la Autoridad Portuaria de Santander, que han facilitado un área protegida y sin corrientes para garantizar la integridad de las piezas durante su proceso de transformación.
El alcalde de Camargo, Diego Movellán, ha destacado la originalidad del proyecto, señalando que “se aprovechan las propiedades del agua marina como elemento esencial para modificar las piezas, combinando la tradición cerámica con un enfoque experimental”.
El promotor de la actividad, Juanjo Revuelta, profesor del Taller de Cerámica, ha explicado que el proyecto comenzó el pasado curso con la elaboración de vasijas inspiradas en culturas clásicas como la griega, romana y fenicia. No obstante, al inicio del año académico se decidió dar un giro a la propuesta, optando por la creación de ánforas sometidas a un horneado a 1.000 grados antes de ser sumergidas.
“El objetivo es que, con el paso del tiempo, los organismos marinos colonicen las ánforas y adquieran un aspecto similar al de los vestigios hallados en antiguos naufragios”, ha detallado Revuelta. Se estima que el proceso de transformación natural durará al menos dos años, tras los cuales se organizará una exposición en el Centro Cultural La Vidriera para mostrar el resultado final.
Movellán ha felicitado al equipo del taller por su implicación en esta iniciativa, que une arte, historia y experimentación en un proyecto innovador que sitúa a Camargo en la vanguardia de la creación artística vinculada al medio marino.














