Podemos Cantabria ha mostrado su rechazo frontal a la propuesta del gerente de Atención Primaria de Cantabria, José María Pérez Ramo, quien ha planteado la posibilidad de cerrar varios Servicios de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) y consultorios rurales en la comunidad. La formación política ha calificado esta iniciativa como un ataque directo a la sanidad pública y un agravio para los habitantes de las zonas rurales, quienes verían limitado su acceso a servicios básicos de salud.
Pablo Gómez, responsable de medio rural de Podemos Cantabria, ha sido contundente en su crítica: “Cerrar consultorios rurales es un golpe a la calidad de vida de los vecinos y vecinas de estas zonas. La atención primaria es un pilar esencial del sistema sanitario, y su desmantelamiento no solo no resuelve los problemas presupuestarios, sino que perjudica gravemente a la población más vulnerable”. Gómez ha subrayado que estas medidas aumentarían las desigualdades en el acceso a la salud, especialmente en áreas que ya sufren históricamente la falta de recursos.
Los consultorios rurales han sido durante décadas el único punto de contacto con el sistema sanitario para miles de habitantes de zonas alejadas. Su cierre obligaría a los ciudadanos a desplazarse largas distancias para recibir atención médica, una situación que afectaría especialmente a colectivos como las personas mayores o aquellas con movilidad reducida. “La salud no puede ser un privilegio reservado a quienes viven en las ciudades. Es inaceptable que se planteen recortes en áreas que ya están desatendidas”, ha añadido Gómez.
Exigencias de Podemos Cantabria
Ante esta situación, Podemos Cantabria ha exigido el cese inmediato del gerente de Atención Primaria, a quien responsabiliza de una estrategia que prioriza la “optimización de recursos” sobre el derecho fundamental a la salud. Además, la formación ha instado al Gobierno de Cantabria a aclarar las declaraciones de Pérez Ramo y a reorientar sus políticas de inversión, apostando por fortalecer la atención primaria en las zonas rurales en lugar de recortar servicios.
Mercedes González, coordinadora autonómica de Podemos Cantabria, ha expresado su indignación ante las palabras del gerente, calificándolas de “inaceptables y vergonzosas”. “Es inadmisible que un responsable de la sanidad pública considere la salud de los ciudadanos como un negocio que, si no es rentable, se cierra. La sanidad pública no se vende, y siempre nos opondremos a los cierres y privatizaciones, porque están en juego vidas humanas”, ha afirmado González.
La dirigente ha recordado que, según el propio Pérez Ramo, existe una grave falta de personal en el sistema sanitario, lo que agrava aún más la situación. “Si no sabe gestionar, quizás debería volver a ejercer la medicina, porque está claro que su enfoque actual no beneficia a la ciudadanía”, ha añadido.
Un debate sobre el futuro de la sanidad pública
Esta polémica se enmarca en un debate más amplio sobre el futuro del sistema sanitario en Cantabria, donde la equidad y la accesibilidad en la atención médica son cada vez más urgentes. Podemos Cantabria ha dejado claro que no permitirá que se recorte el derecho a la salud de los habitantes de las zonas rurales y ha anunciado que movilizará a la sociedad en defensa de un modelo sanitario inclusivo y de calidad para todos, independientemente de su lugar de residencia.
“Exigimos un compromiso real con la sanidad pública y el bienestar de todos los ciudadanos. No vamos a permitir que se siga recortando en servicios esenciales mientras se priorizan otros intereses”, han concluido desde la formación.
La defensa de la sanidad pública y la lucha contra las desigualdades en el acceso a la salud se han convertido en ejes centrales de la agenda de Podemos Cantabria, que promete seguir trabajando para garantizar que ningún cántabro quede desatendido.