El STEC ha denunciado que la propuesta de plantillas enviada por la Consejería de Educación no solo no atiende las necesidades urgentes del sistema educativo, sino que supone un preocupante retroceso en aspectos que ya se consideraban resueltos. La organización sindical advierte de la pérdida de 7 plazas de Maestros, 12 grupos de ESO y 4 de Bachillerato, en un contexto demográfico delicado que, en lugar de aprovecharse para mejorar la calidad educativa, se está traduciendo en recortes de recursos.
Uno de los puntos más alarmantes es el impacto en la educación rural, con la supresión de 37 plazas en Infantil y Primaria, un tercio de ellas en pequeños municipios. En Polaciones y San Pedro del Romeral incluso se eliminan plazas únicas, lo que pone en peligro la continuidad de estos centros. Además, en FP se endurecen los criterios para contabilizar horas lectivas en grupos reducidos, afectando a ciclos en Santander, Torrelavega y otras zonas de Cantabria.
Desde el STEC reclaman la negociación de criterios para establecer las plantillas docentes, evitando decisiones que se limiten a aplicar de forma estricta las ratios máximas sin considerar la atención a la diversidad ni la estabilidad de los claustros. También exigen extender la reducción de ratios a todas las etapas educativas y establecer plantillas tipo en los centros públicos para garantizar recursos de manera equitativa.
El sindicato también pone el foco en la precarización de especialidades como Latín y Griego, donde se prevén supresiones sin ofrecer una solución estable, y en la necesidad de dotar desde el inicio de curso a los equipos de Atención a la Diversidad. Asimismo, reiteran su histórica demanda de suprimir los conciertos con la educación privada, considerando inaceptable el desvío de fondos públicos en un contexto de crisis demográfica.
Otro punto de fricción es el modelo de bilingüismo, que, lejos de mejorar el aprendizaje del inglés, ha generado desigualdades, sobrecarga docente y devaluación de contenidos. El STEC insta a revisar su aplicación con datos y análisis rigurosos.
Ante este panorama, el sindicato exige la apertura de una mesa de negociación con la Consejería para abordar estas cuestiones en profundidad y evitar medidas que comprometan la calidad de la educación pública en Cantabria.