El Grupo Parlamentario VOX ha mostrado su firme rechazo al proyecto de Ley de Simplificación Administrativa del Gobierno de Cantabria, acusando al Ejecutivo de utilizarla como una «Ley Ómnibus» que aborda temas ajenos a la simplificación. Según el portavoz del grupo, Leticia Díaz, la ley ha sido presentada tras 18 meses de promesas, pero aún no ha dado pasos concretos para reducir las trabas burocráticas.
VOX ha señalado diversas deficiencias en el texto presentado, como la generalización de las declaraciones responsables, la ambigüedad sobre las entidades certificadoras, la falta de financiación, y la afectación a competencias municipales, entre otras críticas. Díaz también ha cuestionado la introducción de modificaciones legales no relacionadas con la simplificación y ha calificado el proyecto como un «cajón de sastre», en lugar de una herramienta eficaz. Un punto particularmente controvertido es la inclusión de un artículo que permitiría la construcción de viviendas en suelo rústico mediante Planes Singulares de Interés Regional (PSIR), algo que VOX considera podría fomentar la especulación urbanística.
Para VOX, este proyecto es más un «brindis al sol» que una solución real a los problemas burocráticos de la región, con propuestas vagas y sin una planificación clara. La formación ha afirmado que no apoyará la ley en su forma actual, argumentando que no responde a las verdaderas necesidades de los cántabros.