El puente de diciembre ha cerrado en Cantabria con unos resultados turísticos muy positivos, alcanzando una ocupación media de entre el 75% y el 80% en los principales destinos de la comunidad. Las mejores cifras se han registrado en las zonas de interior y de montaña, especialmente en Reinosa y la comarca de Campoo, donde la nieve ha atraído a numerosos visitantes y ha permitido alcanzar índices de entre el 85% y el 90%.
Según ha detallado el presidente de la Asociación Empresarial de Hostelería de Cantabria (AEHC), Eduardo Lamadrid, las previsiones “se han cumplido e incluso superado en algunos puntos”, especialmente en los destinos asociados a la actividad invernal y en los pueblos con atractivos navideños. “Este tipo de puentes favorece un turismo de escapada, ideal para disfrutar de la naturaleza, la gastronomía y los reclamos ligados a la Navidad”, ha afirmado.
El arranque de la temporada en Alto Campoo, que logró abrir durante el inicio del puente, contribuyó a la buena ocupación en la comarca, aunque la estación tuvo que cerrar el lunes debido a la falta de nieve. A pesar de ello, el tirón del turismo rural y las actividades de montaña permitió mantener una elevada demanda de alojamiento en toda la zona.
También Liébana ha vuelto a situarse entre las comarcas más visitadas, con una media de ocupación cercana al 85%. En el ámbito urbano, los municipios que han apostado por reforzar su oferta navideña han notado un incremento notable de visitantes. Uno de los ejemplos más destacados ha sido Santillana del Mar, que registró niveles próximos a la media autonómica, en torno al 75-80%, gracias al reclamo de su iluminación y programación festiva.
El interés por las luces de Navidad también se ha hecho notar en localidades como Cartes, donde, según el propio Cuevas, “se han llegado a formar colas de coches para acceder al municipio”, un indicador del impacto cada vez mayor que este tipo de propuestas tiene sobre la movilidad turística durante estas fechas.
Por su parte, en la capital, Santander, los hoteles y alojamientos han alcanzado una media de ocupación del 75%, en línea con el conjunto de la comunidad, mientras que las zonas costeras han experimentado una leve bajada. En destinos como Isla (Arnuero) o Somo (Ribamontán al Mar), la ocupación se ha movido en torno al 65%, influida por la mayor estacionalidad del turismo de playa.
En conjunto, el balance del sector durante el puente de diciembre se considera muy positivo, tanto por la afluencia como por el gasto medio registrado. Desde la AEHC subrayan que estos resultados confirman la consolidación de Cantabria como destino preferente para escapadas de invierno, combinando naturaleza, cultura y atractivo navideño.














