El Ayuntamiento de Santander maneja arrancar a principios de 2026 las obras de reforma integral del Mercado de México, un proyecto que ya cuenta con el visto bueno de los técnicos municipales en Aguas, Arquitectura, Bomberos e Ingeniería Industrial, aunque aún pende de alegaciones públicas y la licencia de actividad para el mercado tradicional y el nuevo supermercado de Mercadona. Así lo ha trasladado el concejal de Comercio, Álvaro Lavín, durante los ruegos y preguntas del Pleno de este jueves, presionado por el PRC, corrigiendo los plazos iniciales de finales de 2025 por un retraso que alargaría las actuaciones unos 16 meses hasta la apertura prevista para el primer semestre de 2027. La iniciativa, adjudicada a López Real 09 por 4,4 millones con concesión de 40 años y canon anual de 5.000 euros, mantendrá los 12 puestos tradicionales en un hall visible desde la calle Alta –reubicados durante obras para no cerrar–, rehabilitará sótano, planta baja de 2.178 m², primera de 1.048 m² y almacén de 687 m², con mejoras en saneamiento, accesos, climatización, aseos y fachadas, generando 40 empleos vía Agencia de Desarrollo.
En paralelo, el Pleno ha sacado adelante con votos de PRC, Vox y Grupo Mixto –y abstenciones de PP y PSOE– una moción para desempolvar la rehablitación de la Biblioteca y Casa Museo de Menéndez Pelayo, parada desde 2023 por falta de fondos y proyecto. Ahora toca al Consistorio elaborar y licitar un nuevo plan técnico, cuya aprobación final recaerá en el Ministerio de Vivienda dentro del 2% cultural estatal, un paso clave para rescatar este enclave literario en la capital cántabra que clama por modernizarse sin perder esencia. Esta decisión llega en un contexto de presión vecinal y cultural por patrimonios estancados, similar a otros retrasos en equipamientos municipales.
Medio Ambiente, con Margarita Rojo al frente (PP), se pondrá manos a la obra con un inventario exhaustivo de todos los parques infantiles de Santander para diagnosticar su estado y armar un calendario de mejoras priorizado por técnica y presupuesto. La anuncio surgió en el debate de una moción regionalista para techar el parque Manuel Vélez en Peñacastillo, aprobada por PRC, PSOE, Vox e IU con abstención popular, que suma ampliación de columpios y, gracias a enmienda socialista transaccional, rampas y diseños inclusivos para chavales con discapacidad, garantizando que nadie se quede fuera del juego. Rojo ha defendido este enfoque global frente a parches aislados, prometiendo un plan que cubra necesidades en barrios periféricos como este, donde las familias llevan años pidiendo sombras y seguridad ante el sol cantábrico.
Sobre infraestructuras deportivas, el Gobierno local baraja licitar en tres o cuatro meses la redacción del proyecto de accesibilidad en los Campos de Sport del Sardinero, un viejo anhelo racinguista y ciudadano para eliminar barreras en el templo del fútbol local. En cuanto al Proyecto Victoria del Real Racing Club –centrado en blindar a menores y jóvenes del deporte contra abusos–, la concejala Beatriz Pellón ha zanjado que no precisa enganche a políticas municipales porque la Ley Orgánica de Protección Integral a la Infancia y Adolescencia frente a la Violencia ya da un paraguas normativo «robusto y al día», evitando duplicidades en un Ayuntamiento que prioriza eficiencia sobre burocracia extra.
Este paquete de avances refleja un Pleno productivo en Santander, donde el equipo de Gema Igual responde a la oposición con plazos concretos en comercio, cultura, infancia y deporte, aunque persisten tensiones por ritmos –el Mercado lleva gestándose desde 2024 con retrasos por trámites–. Lavín ha insistido en que la fórmula mixta de abastos tradicionales más gran superficie revitalizará el barrio de México, fidelizando clientes y atrayendo nuevos sin desplazar a los veteranos, en línea con éxitos como Puertochico o Esperanza, mientras el foco en accesibilidad infantil y patrimonial marca el pulso social de una capital que crece sin dejar tirados sus rincones históricos.













