La huelga docente que sacude Cantabria esta semana ha arrancado con un seguimiento considerable en los institutos y centros de Formación Profesional, donde el 40,2% del profesorado ha secundado el paro, según datos facilitados por STEC, ANPE y UGT, sindicatos mayoritarios en la Junta de Personal Docente. La presidenta de la Junta, Rus Trueba, ha calificado esta cifra como un «seguimiento masivo» que refleja el malestar palpable en las aulas ante la falta de avances en las negociaciones con la Consejería de Educación.
Este paro tiene como particularidad su convocatoria escalonada: el lunes ha sido turno para Secundaria y FP; el martes será para las escuelas de adultos, conservatorios y escuelas de arte; el miércoles tocará a las escuelas oficiales de idiomas y equipos de orientación; el jueves se convocará una huelga general que abarcará todos los niveles y el viernes finalizará en Infantil, Primaria y Educación Especial. Frente a esta posición sectorial, Comisiones Obreras ha lanzado una convocatoria que abarca todos los días y todos los centros, buscando fortalecer la presión de forma continua.
La Consejería de Educación de Cantabria ha informado que el seguimiento total de la huelga en todos los centros educativos de la región es inferior al 15%, y en todas las etapas educativas -la consejería se ha negado a facilitar dato por niveles-. Por otra parte, Comisiones Obreras (CC OO) ha cuantificado el respaldo a su propia convocatoria, que abarca cinco días y todos los niveles, en un 30,43% de los centros consultados, destacándolo como un éxito y defendiendo la necesidad de una huelga común para toda la semana y en todos los centros.
El foco principal del conflicto sigue siendo la llamada ‘Cláusula Silva’, fórmulada por el consejero de Educación, Sergio Silva, que condiciona la subida salarial del profesorado a la aprobación de los presupuestos regionales. Este punto ha sido duramente cuestionado por los sindicatos, quienes denuncian que se está utilizando como un obstáculo artificial que frena la actualización salarial y convierte a la plantilla docente en rehén de una agenda política.
En paralelo a estos días de paro, los sindicatos han convocado una manifestación este jueves 23 de octubre a las 18:00 horas en Santander, que partirá de la plaza de Numancia y recorrerá el centro de la ciudad hasta el Centro Cultural Doctor Madrazo, con una parada prevista ante la Delegación del Gobierno. Esta movilización es vista como un momento clave para visibilizar la unidad del profesorado y la exigencia a la Administración de cumplir con los compromisos pendientes.
Desde el inicio del conflicto, que se alarga desde el pasado año con concentraciones y jornadas de huelga, las posiciones se mantienen firmes, sin que se entrevean soluciones inmediatas. La Consejería insiste en que la situación presupuestaria limita las posibilidades, mientras que los sindicatos reclaman un compromiso real que acabe con la pérdida del poder adquisitivo que arrastran desde hace 17 años. Este pulso, lejos de disminuir, extiende la incertidumbre en el sistema educativo, con aulas que ven recortada su actividad y un sector docente cada vez más preocupado por su futuro laboral y retributivo.