El turismo cántabro cerró 2024 con un impacto económico récord de 2.160 millones de euros, lo que equivale al 12,2% del Producto Interior Bruto de la comunidad y a la generación de 32.814 empleos, un 13,3% del total regional. Son cifras que consolidan al sector como uno de los pilares de la economía cántabra y que mejoran los niveles alcanzados antes de la pandemia, cuando representaba el 10,8% del PIB y el 12,3% del empleo, según los datos del estudio IMPACTUR elaborados por Exceltur y presentados en el Palacio de Festivales de Cantabria por el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Luis Martínez Abad, y el vicepresidente ejecutivo de la entidad, Óscar Perelli.
Martínez Abad destacó que este crecimiento “certifica la fortaleza y el avance sostenido de Cantabria en los últimos años” y demuestra el efecto multiplicador del turismo sobre otras actividades, como la industria alimentaria, el transporte o los servicios. Subrayó además el papel del sector como eje de equilibrio territorial, al tener presencia en 100 de los 102 municipios y contribuir a la descentralización económica. Según el informe, el modelo turístico cántabro mantiene un equilibrio sostenible, con 8,8 turistas de media por cada 100 habitantes y sin síntomas de masificación, situando el 87% de las plazas de alojamiento fuera de Santander.
El consejero defendió que el objetivo del Gobierno autonómico “no pasa por batir récords de visitantes, sino por un turismo sostenible basado en la calidad y en viajeros con mayor capacidad de gasto”. Los datos avalan esta tendencia: en 2024, el gasto turístico aumentó un 41,5% respecto a 2019, con un crecimiento del 80% en el desembolso de los visitantes extranjeros. También crecieron las pernoctaciones internacionales (+31,9%) y el número de establecimientos de superior categoría, con un 9% más de plazas en hoteles de cuatro estrellas y un 25% más de ingresos por habitación.
La inversión conjunta, pública y privada, ha sido otro elemento clave para impulsar este auge. En 2024, las administraciones públicas destinaron 269 millones de euros al desarrollo turístico —197 procedentes del Ejecutivo autonómico y 72 de los ayuntamientos—, un 28,5% más que en 2019, gracias al refuerzo de los fondos europeos Next Generation. Martínez Abad destacó el papel del empresariado cántabro, “que ha sabido apostar por la innovación, la diversificación y el emprendimiento”, mientras que Perelli, de Exceltur, insistió en que “el verdadero desafío no es crecer en número de visitantes, sino en valor económico y social del turismo”.
Según el estudio, el turismo internacional representa ya el 22,6% del total, mientras que el mercado nacional sigue siendo el principal motor, con un 51,7% de visitantes procedentes de otras comunidades y un 7,5% de turismo interno. “Hemos conseguido atraer a viajeros con mayor gasto medio, que refuerzan nuestra economía y contribuyen a un modelo turístico equilibrado y sostenible”, concluyó Martínez Abad.