La Policía Local de Santander ha denunciado esta pasada madrugada al responsable de un establecimiento hostelero situado en la calle Profesor Jiménez Díaz por mantener la música a un volumen elevado y provocar molestias a los vecinos del entorno. Los agentes comprobaron además que el local incumplía las condiciones recogidas en la licencia de actividad, motivo por el que se levantó la correspondiente denuncia administrativa.
Durante la jornada del miércoles también se registraron otras intervenciones destacadas. En la calle Bolado, alrededor de las 19:50 horas, fue interceptado un conductor de 47 años que intentó huir de un control policial. Tras ser identificado, los agentes verificaron que tenía el permiso de conducción retirado por pérdida total de puntos, según resolución de la Jefatura Provincial de Tráfico, y además estaba vigente una suspensión dictada por el Juzgado de lo Penal Nº 2 de Santander. El hombre quedó en calidad de investigado no detenido por un presunto delito contra la seguridad vial, y se remitieron las diligencias al juzgado.
En cuanto a la siniestralidad vial, la Policía informó de dos accidentes ocurridos el miércoles en la ciudad. El primero tuvo lugar a las 14:40 horas en la Avenida de la Constitución, donde se produjo un alcance entre dos turismos que dejó herido leve a un hombre de 57 años. Fue auxiliado por la Unidad de Atestados y manifestó que acudiría por sus propios medios a un centro médico. Apenas quince minutos después, en la calle Marqués de la Hermida, a la altura de la confluencia con la calle Federico Vial, colisionaron un turismo y una motocicleta. El motorista, de 22 años, resultó herido y tuvo que ser trasladado al Hospital Valdecilla por una ambulancia del 061.
Finalmente, a las 22:00 horas, agentes acudieron a la calle Río de la Pila tras la llamada de varios vecinos por molestias en la vía pública. Allí identificaron a tres varones de 16, 21 y 23 años que estaban consumiendo alcohol en plena calle. Los tres fueron denunciados por esta conducta y también por infracciones a la Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana, ya que faltaron al respeto a los agentes durante la intervención.