El Pabellón Vicente Trueba vivió una de esas tardes que se graban en la memoria de una afición. El Bathco BM Torrelavega venció por 29-25 a BM Logroño La Rioja en un encuentro que fue un carrusel de emociones: del desconcierto inicial a la euforia final, pasando por la angustia de ir seis goles abajo y la vibración colectiva de una remontada cimentada en el trabajo, la fe y un pabellón entregado.
El guion parecía torcido desde los primeros compases. El Logroño impuso su ritmo frenético en ataque y, aprovechando las imprecisiones locales, abrió brecha en el marcador. La lesión de Leo Tercariol en el isquiotibial parecía añadir más sombras a un arranque desordenado, en el que el equipo de Jacobo Cuétara se vio pronto con un -6 que heló el ánimo en la grada. Sin embargo, de ese caos emergieron dos nombres propios: Carlos Calle, que sustituyó bajo palos al lesionado portero brasileño, y Marko Jurkovic, que con goles y asistencias fue abriendo resquicios en la muralla riojana.
Las manos de Calle, rápidas, seguras y providenciales, levantaron al Trueba y devolvieron confianza a sus compañeros. Cada parada era un aldabonazo en el ánimo naranja, y aunque los visitantes mantenían la renta, el partido empezaba a girar. El tramo final de la primera parte fue un ejemplo de resistencia: goles de Aja, Martínez y Jurkovic, empuje coral y una grada encendida que empujó hasta alcanzar el empate a 13 al descanso.
La segunda parte arrancó con un intercambio de golpes, pero el Bathco ya no era el mismo. Había encontrado el tono defensivo y mordía cada balón con intensidad. Las exclusiones y las protestas arbitrales marcaron un tramo en el que el duelo se volvió áspero, pero en esa batalla el equipo cántabro se sintió cómodo. Isidoro Martínez, con cinco dianas, fue el brazo ejecutor que castigó las grietas riojanas, mientras que Moyano y Silva remaban desde la primera línea y el pivote.
Con el marcador ajustado, el Vicente Trueba se convirtió en un hervidero. Cada parada de Calle —que firmó un extraordinario 45% de eficacia— era celebrada como un gol, y cada contraataque, como un estallido de liberación. A falta de diez minutos, los naranjas tomaron la delantera y ya no soltaron el timón. Con cabeza fría y corazón caliente, gestionaron la presión y ampliaron la ventaja hasta los cuatro goles finales, certificando una victoria que sabe a carácter, a identidad y a comunión con la grada.
El Bathco BM Torrelavega suma así su segunda victoria consecutiva en la Liga NEXUS Energía ASOBAL, se mantiene en el coliderato y afronta la visita al Horneo Eón Alicante con la moral por las nubes. Una montaña rusa de partido que acabó con los naranjas en la cima.
Ficha técnica
Bathco BM Torrelavega, 29 – BM Logroño La Rioja, 25
Goles Bathco BM Torrelavega: Andrés Moyano (4), Marcio Silva (3), Álex Rubiño (1), Javi Muñoz (3), Jakub Prokop (3), Isidoro Martínez (5), Jokin Aja (3), Facundo Cangiani (1), Marko Jurkovic (3), Oswaldo Maestro (1), Ángel Fernández (2).
BM Logroño La Rioja: Pancho Lombardi (3), Álvaro Preciado (2), Oriol Zarzuela (4), Eugen Zaja (1), Álvaro Martínez (4), Miguel Martínez (3), Andrej Pergel (4), David Cadarso (4).
Parciales: 3–4, 5–7, 6–10, 9–12, 10–12, 13–13 (descanso); 15–14, 18–16, 21–19, 23–21, 26–23, 29–25 (final).
Árbitros: [No especificados]. Excluyeron a jugadores de ambos equipos en varias fases del partido.
Pabellón: Vicente Trueba (Torrelavega), ante una afición encendida que llevó en volandas a su equipo.