El Consejo de Ministros ha autorizado este martes el convenio entre Adif, el Gobierno de Cantabria y el Ayuntamiento de Camargo para llevar a cabo el cubrimiento de las vías del tren a su paso por Maliaño. Se trata de un proyecto largamente demandado que supondrá una inversión cercana a los 14 millones de euros y que permitirá transformar una de las principales cicatrices urbanas del municipio.
La actuación consistirá en soterrar un tramo de 275 metros de la línea Torrelavega-Santander y en ejecutar las obras asociadas para urbanizar el nuevo espacio que surja de la cubrición. El plan contempla también la cobertura de las calles Julio de Pablo y Francisco Rivas, los rellenos necesarios para conectar ambas márgenes de la vía y la posterior urbanización, en consonancia con el planeamiento municipal.
El convenio fija un reparto de la financiación: Adif asumirá el 50% del coste y la redacción del proyecto, la Comunidad Autónoma cubrirá el 30% y el Ayuntamiento el 20% restante, además de ceder los terrenos necesarios. Adif se encargará de la licitación y ejecución de las obras, así como de los trámites ambientales y de expropiaciones previas. Una vez concluidas, entregará la urbanización al Consistorio mediante concesión administrativa gratuita.
El consejero de Fomento, Roberto Media, ha calificado la autorización como un “día histórico” para Camargo y ha subrayado que este es “un proyecto transformador en el que se ha trabajado de manera discreta durante meses” junto al Ministerio y al Ayuntamiento. “Las obras supondrán un antes y un después para el municipio”, ha afirmado.
En la misma línea, el alcalde de Camargo, Diego Movellán, ha celebrado que “tras dos décadas de promesas, comienza la cuenta atrás para hacer realidad uno de los grandes sueños de los camargueses”. Según ha explicado, la cubrición permitirá ganar 17.500 metros cuadrados de espacio público que se destinarán a zonas verdes y de convivencia. “La gran cicatriz urbana que ha partido en dos Maliaño y Muriedas desaparecerá y dará paso a un entorno limpio, seguro y moderno”, ha señalado.
Por su parte, el delegado del Gobierno en Cantabria, Pedro Casares, ha destacado que el Ejecutivo central “está absolutamente comprometido” con la actuación. “Este proyecto ha estado décadas en la agenda sin avanzar y solo con el Gobierno de Pedro Sánchez se han dado pasos definitivos para materializarlo”, ha asegurado, recordando que la previsión es que los trabajos arranquen en 2028.













