El arranque del curso escolar en Cantabria sigue pendiente de lo que ocurra este jueves en la mesa de negociación entre la Consejería de Educación y la Junta de Personal Docente. Los sindicatos han convocado al consejero, Sergio Silva (PP), para trasladarle una nueva propuesta de acuerdo que, aseguran, se ajusta a los márgenes económicos y temporales que maneja el Ejecutivo autonómico y que permitiría frenar la huelga de 13 jornadas anunciada para septiembre.
La Junta de Personal —integrada por ANPE, STEC, CCOO, TU y UGT— sostiene que la propuesta que pondrán sobre la mesa tiene una base “realista y suficiente” para alcanzar un consenso que evite un nuevo conflicto en las aulas. Los representantes de los trabajadores insisten en que la solución pasa por una adecuación salarial justa y una revisión de las condiciones de formación ligadas a la carrera docente.
Silva, que confía en que la reunión sirva para cerrar el acuerdo, reconoció este miércoles que el margen de negociación no pasa tanto por un incremento económico respecto a lo ya ofrecido, sino por reordenar el calendario de pagos y atender a reivindicaciones en materia de formación. En concreto, la Consejería está dispuesta a reducir de 180 a 150 las horas exigidas para acceder a cada sexenio, aunque el consejero precisó que este ajuste responde únicamente a la voluntad de alcanzar un acuerdo, no a que considere que “menos formación sea algo positivo”.
En la última reunión celebrada en julio, el Gobierno había puesto sobre la mesa una subida lineal de 180,23 euros mensuales en cinco anualidades —equivalente a 2.523 euros anuales— y otra de 187,73 euros al año vinculada a la carrera profesional y a los sexenios de formación permanente. Una propuesta que, pese a las sucesivas rebajas en las exigencias de horas de formación (de 300 a 180), no logró cerrar un pacto.
El titular de Educación lamentó que, tras ocho encuentros, no se haya alcanzado todavía un entendimiento, algo que considera “desagradable” y que, en su opinión, podría haberse resuelto antes. “He entrado en todas las reuniones con voluntad de acuerdo y en ocasiones me he llevado sorpresas desagradables. Vuelvo a esta con el mismo ánimo”, subrayó.
Silva defendió además que el Ejecutivo cántabro es “el primero en 17 años” que ha abordado con propuestas concretas la mejora retributiva del profesorado, un esfuerzo que, a su juicio, no debería tener como respuesta una convocatoria de huelga. “Los docentes no están mal retribuidos; hay que mejorar, sí, pero ya hubo tres huelgas el año pasado y ahora hablamos de 13 días más al inicio del curso”, recordó.
De momento, la tensión se mantiene en el ámbito educativo cántabro a la espera de la reunión de este jueves, que será decisiva para determinar si los colegios e institutos de la región inician las clases con normalidad o con un nuevo conflicto laboral en el horizonte.