El Grupo Alega Cantabria cerró una temporada de altibajos por todo lo alto. El Vicente Trueba vivió una jornada especial, donde el resultado final (84-69 frente al Odilo FC Cartagena) quedó en segundo plano ante la emotiva despedida de Mirza Bulic, jugador emblemático que deja el club tras cuatro temporadas.
Primera mitad de ensueño
Los de Lolo Encinas salieron con hambre desde el primer minuto. Un rápido 5-0 inicial, con Jaden Bediako y Bulic como protagonistas, marcó el tono de lo que sería una exhibición en los primeros 20 minutos. Bennet Hundt, recién recuperado de su lesión, aportó frescura con un triple y una canasta de dos que ampliaron la ventaja (24-12 al final del primer cuarto).
El segundo periodo fue aún más demoledor. Hansel Atencia, en estado de gracia, encestó dos triples consecutivos que llevaron el marcador a un abultado 43-19. La defensa local ahogó a los cartageneros, incapaces de encontrar respuestas ante el juego coral del Alega. El descanso llegó con un contundente 48-25 que dejó vislumbrar lo que sería una noche festiva.
Reacción tardía y homenaje a Bulic
Tras el intermedio, el Odilo mostró más orgullo y recortó distancias (61-46), pero sin llegar a inquietar seriamente al conjunto local. El último cuarto fue un mero trámite donde Encinas rotó a sus jugadores, dando minutos a los menos habituales como Juan Sánchez, que respondió con un triple.
El momento más emotivo llegó cuando Bulic abandonó la pista por última vez, recibiendo una ovación cerrada de los más de 2.000 aficionados presentes. Las lágrimas del bosnio al ser homenajeado con un vídeo de sus mejores momentos confirmaron lo que ya se sabía: Torrelavega despide no solo a un jugador, sino a parte de su historia reciente.
Una temporada superada
El partido sirvió como colofón a una campaña marcada por las dificultades, pero que finalmente cumplió sus objetivos. «Hemos sufrido, pero también hemos crecido como equipo», declaró Encinas en rueda de prensa.