La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha mantenido este martes su primer encuentro institucional con Pablo Alonso, nuevo director de Solvay en Torrelavega. Durante la reunión, celebrada en la sede del Gobierno regional, Buruaga reiteró el compromiso de su Ejecutivo con la instalación de una planta de cogeneración de biomasa en la fábrica cántabra, una iniciativa declarada estratégica el pasado mes de enero.
Este reconocimiento resulta clave para que la compañía pueda acceder a los certificados de ahorro de emisiones de dióxido de carbono, un paso imprescindible para avanzar en el desarrollo del proyecto. La futura planta, que contará con una inversión de 250 millones de euros y una potencia de 49,99 megavatios, se perfila como un factor determinante en el futuro industrial de Solvay en la región.
Buruaga expresó su confianza en que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico conceda cuanto antes los certificados necesarios para que la empresa pueda iniciar las inversiones. Recordó, además, que el PERTE concedido a Solvay, por valor de más de 30 millones de euros, establece que la nueva instalación debe estar operativa en el segundo trimestre de 2026.
En la reunión también estuvieron presentes los consejeros de Industria, Eduardo Arasti, y de Medio Ambiente, Roberto Media, así como Jorge Oliveira, anterior director de la planta de Torrelavega y actual responsable de Solvay en España y Portugal. Buruaga aprovechó la ocasión para agradecer a Oliveira su labor en Cantabria durante más de una década.