A partir de este jueves, los usuarios de los trenes de Cercanías y Media Distancia en Cantabria deberán volver a pagar las tarifas habituales, tras el rechazo en el Congreso de los Diputados al Real Decreto ley ómnibus que incluía esta bonificación especial. Este compromiso, firmado en 2023 por el Ministerio de Transportes junto con los gobiernos de Cantabria y Asturias, buscaba compensar el retraso en la llegada de los nuevos trenes debido al escándalo de los modelos que no cabían por los túneles, un error que había causado indignación en ambas comunidades.
El consejero de Fomento, Roberto Media, ha sido tajante: “No vamos a permitir que Sánchez y sus ministros se rían de los cántabros”. Media ha afirmado que el Gobierno regional reclamará «con contundencia» el cumplimiento del acuerdo, incluyendo la posibilidad de acudir a los tribunales.
Compromiso incumplido
El convenio firmado en 2023 aseguraba la gratuidad de los trenes de Cercanías en Cantabria y Asturias hasta la llegada de las nuevas unidades previstas para 2027. Sin embargo, este compromiso se encontraba dentro del Real Decreto rechazado en el Congreso con los votos en contra del PP, Junts y Vox. Según la Delegación del Gobierno en Cantabria, esta decisión deja sin efecto las ayudas extraordinarias que beneficiaban a miles de cántabros.
La delegada del Gobierno en Cantabria, Eugenia Gómez de Diego, ha lamentado la situación y ha acusado al PP de “dar la espalda a los ciudadanos”. Gómez de Diego ha señalado que esta medida perjudica especialmente a los pensionistas, las familias vulnerables y sectores estratégicos como la industria electrointensiva, que también pierde importantes incentivos incluidos en el decreto.
Impacto en el transporte público
El fin de los descuentos no solo afecta al transporte ferroviario, sino también a los autobuses urbanos y regionales. En Santander, Torrelavega y Castro Urdiales, los ayuntamientos han decidido mantener temporalmente los descuentos, asumiendo el coste que antes correspondía al Gobierno central, mientras esperan una decisión definitiva. Por su parte, el Gobierno regional continuará subvencionando el 20% de los billetes de autobuses interurbanos, aunque los usuarios verán un aumento en los precios al no asumirse el 30% que aportaba el Ejecutivo nacional.
Reacciones y futuro
El Gobierno cántabro confía en que se pueda negociar una solución en el Congreso para mantener las ayudas, separando este asunto de otras medidas incluidas en el decreto rechazado. “Hay margen para pactar porque siempre tendrán nuestro apoyo para sacar adelante estas ayudas”, señaló Roberto Media.
La delegada del Gobierno ha instado al PP a reflexionar sobre el impacto de esta decisión, mientras que desde el Ejecutivo regional piden al Gobierno de Sánchez “que recapacite” y cumpla con los acuerdos firmados.
Mientras tanto, los usuarios del transporte público en Cantabria afrontan un panorama de incertidumbre y un aumento de los costes que afecta directamente a su economía y movilidad.