El consejero de Economía, Hacienda, Financiación Autonómica y Fondos Europeos de Cantabria, Ángel Agüeros, compareció ante el Parlamento de Cantabria, a petición del PSOE, para informar sobre la aprobación del techo de gasto para los presupuestos generales de la Comunidad Autónoma de 2025. Esta comparecencia, inicialmente programada para la semana anterior, se aplazó debido al fallecimiento del padre del consejero. En su intervención, Agüeros confirmó que el límite de gasto no financiero para el próximo ejercicio será de 3.280 millones de euros, lo que supone un incremento de 92 millones respecto al presupuesto de 2024, y subrayó que este crecimiento no podrá exceder el 3,2%, en línea con la reactivación de la regla de gasto por parte de la Unión Europea. Esta norma, suspendida durante la pandemia en 2020, vuelve a ser prioritaria y, según el consejero, será la «regla fiscal más preponderante» a la hora de confeccionar los presupuestos de 2025, superando incluso al objetivo de déficit público.
Durante su intervención, Agüeros destacó que el aumento del techo de gasto permitirá seguir protegiendo los servicios públicos esenciales, como la sanidad, la educación y los servicios sociales, áreas que «seguirán batiendo récord de consignación presupuestaria». Afirmó que las cifras previstas para estos sectores serán «las más altas de la historia» en la comunidad autónoma, confirmando así el compromiso del Ejecutivo con el fortalecimiento de estos servicios. En cuanto al presupuesto total, el consejero adelantó que las previsiones indican que la cifra final rondará los 3.720 millones de euros, lo que representará un aumento cercano al 5% en comparación con el presupuesto de 2024. Este incremento no solo se debe al crecimiento del gasto no financiero, permitido por la regla de gasto, sino también al aumento del coste de la deuda. Aunque Cantabria terminará 2024 con una deuda ligeramente inferior a la de 2023 (3.250 millones frente a los 3.316 millones del año anterior), los nuevos préstamos serán más caros debido a un aumento en los tipos de interés, que rondan el 3%.
En su comparecencia, Agüeros también abordó las «certezas e incertidumbres» que rodean la elaboración de los presupuestos de 2025. Entre las variables que generan certidumbre, destacó la regla de gasto, mientras que factores como una posible prórroga de los presupuestos generales del Estado para 2025 y las implicaciones del nuevo modelo de financiación autonómica se perfilan como elementos inciertos que podrían complicar la planificación financiera. El consejero recalcó que, ante este escenario, la elaboración del presupuesto debe basarse en una «prudencia máxima», con previsiones de ingresos no financieros (capítulos 1 al 7) realistas y transparentes.
Críticas de la oposición
La exposición técnica del consejero no disipó las dudas ni las críticas por parte de la oposición, especialmente de los partidos PRC, PSOE y Vox. Paula Fernández, del Partido Regionalista de Cantabria (PRC), manifestó su escepticismo sobre la viabilidad del equilibrio de déficit cero y la reducción de la deuda que propone el Gobierno. A su juicio, la teoría es más fácil que la práctica, y expresó preocupación por las partidas presupuestarias destinadas a personal (capítulo 1), que considera «insuficientes». Fernández también subrayó que el presupuesto vigente presenta una ejecución del 57% a finales de septiembre, lo que significa que «más de un tercio» del presupuesto aún debe ejecutarse en los últimos meses del año, algo que calificó de preocupante.
Por su parte, Ana Belén Álvarez, del PSOE y exconsejera de Economía, puso en duda los efectos positivos de la reforma fiscal impulsada por el Gobierno autonómico. Señaló que aunque algunos ingresos, como los provenientes de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, han aumentado, ello se debe más a un incremento en las bases imponibles que al número de operaciones realizadas, que ha disminuido. Además, Álvarez cuestionó la capacidad del Ejecutivo para gestionar adecuadamente el aumento de 92 millones de euros en el techo de gasto, dadas las numerosas promesas y compromisos asumidos. En este contexto, recordó las advertencias de la AIREF (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal), que ha alertado del «riesgo» de que Cantabria incumpla la regla de gasto.
El parlamentario de Vox, Cristóbal Palacio, también se sumó a las críticas y expresó su insatisfacción con la reforma fiscal del Partido Popular (PP), afirmando que el gobierno ha realizado solo una «mínima» reducción de los tipos impositivos y que, en realidad, la presión fiscal ha aumentado. Palacio también lamentó que no exista un techo de gasto a nivel nacional, lo que impide tener una visión clara de los ingresos y gastos del país, y criticó el modelo de financiación autonómica propuesto para Cataluña, el cual considera que perjudicaría a Cantabria, ya que podría implicar una pérdida de hasta 600 millones de euros para la región.
Defensa del PP y preocupación por la financiación autonómica
En respuesta a las críticas, el diputado del PP Carlos Caramés defendió la reforma fiscal llevada a cabo por el Gobierno autonómico y destacó que el incremento del presupuesto se debe, en gran parte, a una mayor recaudación derivada del aumento de la actividad económica, gracias a la bajada de impuestos. Caramés también se refirió al sistema de financiación autonómica y advirtió del «peligro real» que supone para Cantabria el modelo previsto para Cataluña, argumentando que este podría imponer una carga injusta sobre el resto de las comunidades autónomas, incluida Cantabria. Según Caramés, el precio de los pactos del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con los partidos independentistas catalanes «pretende que lo paguemos el resto de los españoles», incluidos los cántabros.
Además de la comparecencia de Agüeros sobre el techo de gasto, el pleno del Parlamento de Cantabria también trató otros temas de interés. Entre ellos, el consejero de Turismo, Cultura y Deporte, Luis Martínez Abad, informó sobre los avances en el proyecto del tobogán alpino para el Parque de la Naturaleza de Cabárceno, una instalación que se espera esté en funcionamiento para el otoño de 2025. Martínez Abad defendió la iniciativa, afirmando que no es un «capricho» sino una «oportunidad» para desestacionalizar el turismo y atraer a un público más joven.
Por otro lado, el consejero de Fomento, Roberto Media, respondió a preguntas del Grupo Socialista sobre la mejora de las líneas de transporte entre Castro Urdiales y Santander. Media explicó que las concesiones actuales están caducadas y prorrogadas, pero aseguró que su departamento está trabajando en un nuevo mapa concesional que recogerá las necesidades de los ciudadanos.
Finalmente, la sesión plenaria concluyó con la aprobación de varias mociones y proposiciones no de ley presentadas por los grupos parlamentarios, entre ellas, una iniciativa del PSOE para garantizar la cobertura sanitaria de todas las especialidades en el hospital de Laredo y otra del PRC para reducir los tiempos de espera en la valoración de los grados de dependencia. También se aprobó una moción de Vox para dinamizar el polígono industrial de Vallegón y otra propuesta del PRC, apoyada por PP y PSOE, para lanzar campañas de prevención de enfermedades de transmisión sexual.












