Los profesionales de los Servicios de Urgencia de Atención Primaria (SUAP) en Cantabria, incluyendo médicos, enfermeras y celadores, han establecido un plazo de un mes para que el Gobierno autonómico se siente a dialogar con representantes del colectivo y aborde las «problemáticas y necesidades» del sector. En caso contrario, han advertido que iniciarán movilizaciones, entre las que se contempla la posibilidad de una huelga durante la Semana Santa.
La decisión fue tomada de manera unánime por casi un centenar de trabajadores en una Asamblea celebrada en el hospital de Liencres, convocada por el sindicato CSIF y la asociación aSUAP. En dicha reunión, reiteraron sus problemas laborales y expresaron su malestar ante lo que perciben como una falta de atención y negociación por parte de la Administración, situación que ya motivó una huelga en mayo de 2023, días antes de las elecciones autonómicas en Cantabria.
Uno de los puntos críticos que han destacado es la imposibilidad de disfrutar de vacaciones, permisos y descansos debido a la falta de sustitutos o la negativa a conceder dichas licencias. Además, se han manifestado preocupados por el incremento de agresiones físicas y verbales hacia el personal, así como por la sobrecarga de trabajo, que pone en riesgo tanto la salud de los profesionales como la de los ciudadanos al aumentar el riesgo de errores médicos, especialmente en centros con más de 100 urgencias diarias.
El sindicato CSIF ha señalado que las reiteradas solicitudes de diálogo y las propuestas de solución presentadas a la Consejería de Salud y a la Gerencia de Atención Primaria han sido ignoradas por la Administración, incluso después de más de una docena de reuniones desde agosto pasado. Ante este desinterés, los profesionales de los SUAP han decidido levantar la voz y tomar medidas de protesta.














