“Nos están dejando morir”. Con estas palabras, Salvador Fernández Cano, director de la Radio Municipal de Los Corrales de Buelna, resumía la dramática situación que atraviesa la emisora. Una deuda de más de 25.000 euros por parte del Ayuntamiento amenaza con poner fin a un proyecto que, durante 28 años, ha sido una pieza fundamental en la vida del municipio.
Desde sus inicios, la radio ha sido mucho más que un medio de comunicación. Ha sido un altavoz para la comunidad, un punto de encuentro para los vecinos y una herramienta clave en momentos de emergencia. Sin embargo, la falta de financiación por parte del Consistorio pone en jaque su continuidad. “Llevamos casi tres décadas dando voz al pueblo, haciendo mucho más de lo que se nos pide, y ahora nos encontramos abandonados, como si no importáramos”, lamenta Fernández Cano, visiblemente emocionado.
La situación no es nueva. Según explica el director, desde 2010 el Ayuntamiento no ha actualizado la aportación económica destinada a la emisora, mientras que los gastos de producción y mantenimiento han seguido aumentando. Aun así, el equipo ha logrado mantener una programación variada y de calidad que incluye información local, entretenimiento y programas dedicados a eventos culturales y deportivos. “Desde hace años estamos sobreviviendo al límite, estirando cada euro para mantenernos a flote. Pero ahora mismo, la cuerda se está rompiendo”, confiesa.
Un servicio vital, a un precio irrisorio
Uno de los aspectos más llamativos del conflicto es el coste mínimo que supondría mantener la radio en funcionamiento. Según Fernández Cano, el presupuesto anual equivale a apenas 1,8 euros por habitante. “Estamos hablando de menos de dos euros al año por vecino, menos que un café. ¿De verdad vamos a dejar que desaparezca un servicio tan esencial por eso?”, reflexiona con amargura.
El impacto de la radio en Los Corrales de Buelna no se mide solo en números, sino en historias. Desde su papel en eventos locales hasta su capacidad para conectar a los vecinos, especialmente durante la pandemia, la emisora ha demostrado ser un pilar imprescindible para el municipio. Sin embargo, esa relevancia no parece haber calado en las decisiones políticas. “La radio no es solo nuestra, es de los vecinos. Y si desaparece, perderemos algo que nos hace únicos como comunidad”, sentencia.
Silencio por respuesta
Por el momento, el Ayuntamiento no ha emitido ningún comunicado oficial ni se ha pronunciado sobre la deuda. Este silencio institucional incrementa la incertidumbre entre los trabajadores de la emisora y los ciudadanos, que temen perder un servicio que consideran parte de su identidad.
“No estamos pidiendo lujos ni privilegios. Solo pedimos lo mínimo para poder seguir haciendo nuestro trabajo, para seguir sirviendo a este pueblo como lo hemos hecho durante casi 30 años”, concluye Fernández Cano.
El futuro de la Radio Municipal de Los Corrales de Buelna pende de un hilo. Mientras tanto, el silencio administrativo se convierte en el eco más ensordecedor en un municipio que, por ahora, no ha encontrado una respuesta al llamamiento de su emisora.













