El Gobierno de Cantabria tiene previsto licitar el servicio programado de ambulancias en aproximadamente tres semanas, luego de que el tribunal levantara la suspensión cautelar debido al recurso presentado por la Asociación de Empresas de Transporte Sanitario (AETRANS-Sanit). El consejero de Salud, César Pascual, ha comunicado este lunes a los medios que las mesas se reunirán lo antes posible y se seguirán los plazos establecidos por la Ley de Contratos, que son de alrededor de tres semanas. El gerente del Servicio Cántabro de Salud (SCS), Luis Carretero, ha añadido que dentro de esos plazos, se llevará a cabo el proceso lo más ágilmente posible.
Respecto a la situación de las ambulancias del SCS, que ha sido denunciada como «alarmante» por Ciudadanos durante el fin de semana, Pascual ha explicado que las ambulancias que necesitan ser sustituidas ahora, especialmente las del transporte urgente, lo serán según lo planificado.
En cuanto al transporte no urgente, dependerá de la empresa ganadora del concurso y de su disponibilidad en el proceso de licitación.
En relación con el proceso de licitación del transporte sanitario programado, la empresa Ambuibérica, que ha gestionado el servicio durante diez años, se ha desvinculado definitivamente del proceso negociado abierto por Sanidad. Esta situación puede complicar las cosas para la Consejería de Salud, ya que ahora depende de las respuestas de las otras dos empresas aspirantes: la sevillana Servicios Sociosanitarios Generales (SSG), presentada como Digamar Servicios S.L., y la valenciana Diavida. Ambas fueron descartadas anteriormente por incumplimientos del pliego en el proceso de licitación del año pasado, pero podrían haber subsanado estos problemas en este nuevo intento. En caso de que alguna de estas empresas logre las condiciones y no haya perdido interés en el contrato del SCS, sería necesario iniciar el despliegue logístico desde cero, ya que ninguna de ellas cuenta con experiencia previa ni infraestructura en la región, aunque la plantilla sería subrogada.