Comisiones Obreras de Cantabria (CCOO) ha expresado su preocupación en una conferencia de prensa hoy sobre el aumento de la brecha salarial de género en 2021, revirtiendo la tendencia descendente que se observaba desde 2015, año en que alcanzó su punto máximo con un 40,7% en Cantabria, lo que sitúa a la región como la cuarta con mayor brecha salarial. Según las cifras más recientes disponibles, el salario medio de las mujeres en 2021 fue de 21.532 euros, lo que significa que debería aumentar un 26,5% (5.700 euros) para igualar el salario medio de los hombres, que fue de 27.233 euros.
Con motivo del Día Europeo de la Igualdad Salarial el jueves 22 de febrero, Rosa Mantecón, secretaria general de CCOO de Cantabria, acompañada por el economista de CCOO Raúl Fernández Rodríguez, ha delineado las desigualdades estructurales entre hombres y mujeres en el mercado laboral cántabro. CCOO ha destacado que la brecha salarial persiste en todos los niveles de ingresos, edades y sectores, siendo el sector servicios donde se registra la mayor brecha, dado que emplea principalmente a mujeres. El sindicato aboga por abordar los salarios a través de la negociación colectiva y el Salario Mínimo Interprofesional, así como por revisar el tiempo parcial y la división sexual del trabajo, que asigna principalmente a las mujeres la responsabilidad de los cuidados, independientemente de si tienen empleo.
La desigualdad salarial entre hombres y mujeres está arraigada en múltiples factores sociales y laborales que afectan a lo largo de la vida de las mujeres. Mantecón señaló que comienza con la socialización y la educación, continúa durante la carrera laboral con condiciones laborales menos favorables, y concluye en la jubilación con menores pensiones debido a las menores cotizaciones a la Seguridad Social.
Durante la conferencia de prensa, se destacaron cuatro elementos estructurales que contribuyen a la brecha salarial: la inactividad, el trabajo a tiempo parcial, la segmentación sectorial y la representación desigual en los puestos de trabajo.
Mantecón concluyó que para abordar la desigualdad salarial, es crucial redistribuir los roles de cuidado y promover la corresponsabilidad desde la educación. También enfatizó la necesidad de valorar adecuadamente las ocupaciones esenciales y aumentar las políticas públicas para abordar los cuidados, ya que la persistencia de las mujeres en estas responsabilidades sigue afectando negativamente a sus carreras y salarios.