El Gobierno de Cantabria ha decidido descender a situación 1 el Plan Territorial de Emergencias de Protección Civil (PLATERCANT), que fue activado en su nivel de riesgo 2 el 9 de enero debido al vertido de microplásticos en la costa provocado por la pérdida de contenedores de un barco en la costa portuguesa. La decisión se basa en la constatación de una estabilización en la llegada de pellets, que sigue siendo poco significativa y dispersa. Además, los modelos predictivos de movimiento del vertido elaborados por el Instituto de Hidráulica Ambiental de la Universidad de Cantabria indican una tendencia al alejamiento de los microplásticos de la costa en los próximos días.
Con esta desescalada, se reducirá el número de efectivos que participan en las labores de retirada de los pellets en los arenales, adaptándolo a la situación actual de llegada contenida del vertido. Se mantendrán cuadrillas de limpieza en las playas con personal ajustado a la evolución de la situación. La Consejera de Presidencia, Isabel Urrutia, indicó que se continuará siendo prudente y se adaptarán los equipos de vigilancia y limpieza a la evolución del episodio de contaminación marítima.
A pesar de la desescalada, se mantendrá la vigilancia de las playas y los contactos con Galicia y Asturias para seguir monitoreando el alcance del vertido y los posibles cambios en sus niveles de afección a la costa cantábrica. Se ha solicitado al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) que continúe aportando medios para apoyar a los equipos de la Administración autonómica.
Desde el inicio del vertido el 9 de enero, se han recogido 12.9 kilogramos de pellets en 505 acciones de vigilancia y retirada en 21 municipios costeros. Además, se han examinado ocho puertos sin encontrar presencia de partículas plásticas, y se han utilizado medios aéreos en zonas marinas sin detectar sacos procedentes del vertido.