Durante todo agosto, las obras del AVE interrumpirán el tráfico ferroviario entre Santander y Palencia. Adif llevará a cabo dos proyectos técnicamente complejos y de gran planificación: el avance de la Línea de Alta Velocidad (LAV) Palencia-Santander y la duplicación de la vía convencional entre Torrelavega y la capital cántabra. Esta situación obligará a los pasajeros a realizar transbordos por carretera, mientras Renfe está finalizando el plan de transporte alternativo, del cual informará pronto. Las obras, programadas del 1 al 31 de agosto, son incompatibles con el tráfico ferroviario, afectando a diversos servicios en Santander, Aguilar de Campoo, Reinosa, Torrelavega, Palencia, Alar del Rey y Quintanilla de las Torres, según Adif.
En cuanto a la nueva Línea de Alta Velocidad, Adif construirá tramos de plataforma, la base sobre la que se colocarán las vías, paralelos y cruzando la línea convencional Palencia-Santander, sumando aproximadamente un kilómetro. Uno de estos tramos se extenderá más de cien metros a la salida de Palencia en el tramo Palencia-Palencia Norte, y otro en el tramo Palencia Norte-Amusco. Para cruzar las líneas, se construirá un viaducto de 80 metros cerca de Marcilla de Campos en Palencia, parte del tramo entre Amusco y Osorno.
Simultáneamente, Adif iniciará una nueva fase de la duplicación de la vía convencional entre Torrelavega y Santander, dentro del Plan de Cercanías de Cantabria. Los trabajos incluirán la construcción de la plataforma para la segunda vía y su electrificación en el tramo entre Renedo y Guarnizo (1,8 kilómetros). También se construirá un paso inferior para eliminar el paso a nivel de Parbayón, se adecuarán la estación de Torrelavega y los apeaderos de Parbayón y Guarnizo, se adaptará una subestación y se instalarán ocho nuevos enclavamientos entre Mataporquera y Bárcena para gestionar las señales ferroviarias de forma remota.